Sentado sobre mi cama, con las piernas cruzadas, no puedo dormir y veo el tiempo pasar frente a mí jugueteando con mi insomnio a burlarse de mi vida. Fuera de mi ventana allá arriba puedo verla feliz sonriente iluminando a todos, brilla y sonríe por la felicidad de sus hijos a quienes cuida cuán vigía; sonríe por mi felicidad y por lo que soy ahora. Sus guardianas, todas esparcidas en la inmensidad del negro mar con luces guías, para que todo aquel que pierda su camino no se sienta desamparado, la rodean y resguardan. Siempre dejándole espacio por respeto, respeto a su presencia y a su ser.
Puedo ver como un rayo de luz blanca y azul entra por mi ventana, es su dulce saludo, suavemente y cae sobre mi cama. Cuando sigo la luz puedo ver como la ilumina a mi costado durmiente y bella como ninguna… como ilumina a la razón de mi vida. Se ve tan bella y majestuosa echada ahí. Volando entre sábanas blancas y pijamas de seda, no puedo dormir pero ella duerme tan plácidamente y en cada momento la amo más.
- …
- No quiero perder ni un momento de estar contigo… eres la razón de mi caminar diario, eres la razón de mi ser… deseo cuidarte hasta en tus más profundos sueños.
Le susurro al oído aunque no se si me pueda escuchar, de repente sonríe pero sigue dormida. ¿Será que si me escucho en realidad? Puedo sentir su respiración lenta, sus labios cerca y su corazón con el mío. Tan dulce, tan bella… veo pasar los segundos, los veo crecer para convertirse en minutos y estos minutos crecen para ser horas. El tiempo pasa y se vuelve más viejo para luego rejuvenecer y ser joven otra vez. Te miro y te amo con cada rejuvenecer y construyo castillos de sueños para los dos, para poder vivir juntos en ellos.
- En esta vasta noche, frente a nuestros testigos personales… que nos han cuidado toda nuestra vida…
Empiezo a decir lentamente y lentamente escojo cada palabra, cada frase.
- Prometo ser para ti el único y que seas mi amor eterno… sea aquí y ahora o en algún futuro incierto… sea en este lugar o en otro… sea que estemos juntos en un sueño o separados en la realidad… estaré a tu lado cuando me necesites y por ti seguiré luchando.
Las horas que crecieron pronto se convirtieron en días, y el señor de la tierra viene a dar su brillante saludo. Todo se comienza a iluminar mientras las guardianas y su custodiada se van a dormir una vez más.
La brillante luz entra por la ventana donde hace solo unos minutos había estado soñando. Entra para saludarnos a un nuevo día y a una nueva esperanza. De repente te veo de vuelta a la tierra, regresas de tu dulce vuelo.
- Amor ¿Que haces?
- No pude dormir en toda la noche…
- ¿Te sientes cansado?
- No… tuve una noche maravillosa |