Bienvenida realidad, después de un par de meses fuera de la ciudad la verdad es que es medio difícil ponerse al día con las tareas cotidianas, es mas no recuerdo bien que es lo que tenia que hacer los martes, no se si eso es malo o solo es que estoy sufriendo este paso de la re-acomodación en donde todo parece un poco mas lejano y difuso. La verdad es que pensándolo bien no recuerdo que es lo que hacia todos los días, no recuerdo bien como era mi vida, de lo ultimo que me acuerdo es de Sofía, mientras lavaba la loza de la cena de esa noche, acabábamos de despedir a los amigos de siempre, que habían cenado con nosotros, no se que fue pero se que estaba molesto por algo, no recuerdo bien que es lo que me pasaba, pero mientras ella pulía los platos yo seguía bebiendo, la miraba y de algo discutíamos, luego me abalance hacia ella, no se por que, pero lo hice trate de pedirle una explicación, la cual no recuerdo por que era, se que comenzó a ponerse todo cada ves mas tenso, cada ves mas intenso, los ánimos se calentaron de sobremanera, yo estaba demasiado enojado………….. y nada después todo es oscuridad, todo se fue a negro no recuerdo mas, hasta que desperté y estaba en un hospital, amarrado a la cama, con un policía haciéndome guardia en la puerta de la habitación. Dos días después estaba ante un juez el que me decía que mi condena era de tres años por asesinato frustrado, no entendía nada, yo jamás habría sido capaz de hacer algo así, yo amaba demasiado a Sofía, no entiendo que paso, no recuero nada, solo se que he vuelto a mi casa y aquí los recuerdos tampoco están.