¿Volar? ¿Dejar que la noche absorba el golpe?
Ni siquiera el dolor apaga el dolor. Sangran las voces entonando mi fin.
¿Descender? ¿Ser el volátil retrato de un odio?
Ni un eterno espejo podría reflejarlo. Gritan las sombras de asco furioso.
En frases escritas con gotas de miedo.
En fotos tomadas por ojos desenfocados.
En deseos nacidos de hordas pujantes.
En cielos caídos sobre sueños desolados.
Siempre la imagen del delirio inconstante…
¿Confiar? ¿Dejar que el futuro proponga quimeras?
Ni un adicto demonio querría mi alma. Callan las horas al pasar sobre mí.
¿Renacer? ¿Ser acogido otra vez por la ausencia?
Ni el agónico exilio sería castigo. Borran las huellas de mi absurda materia.
En versos cantados por gusanos lascivos.
En oleos pintados por efluvios malsanos.
En trovas vedadas de ser vislumbradas.
En películas porno de sexos deformados.
Siempre la imagen del delirio inconstante…
Llorar. Llorar… Demasiada vida como penitencia.
Texto agregado el 15-09-2007, y leído por 231
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Lectores Opinan
14-10-2007
Mejor amar ...me gusta la intensidad de tus versos. naiviv
21-09-2007
¿ que hacer en este momento?...me sentia perdida dentro del sol, en verdad no se si aun existia pero tu poema me a reanimado a recoger lo poco de oscuridad que me queda y regresar al bosque de penunbra que si me ama. fantasya-cero