Ahhhh … curioso, ese sonido debió haber sido un poco mas fuerte, en cierta manera lo siento un poco sofocado. Me pregunto porque, quiero ubicarme, estoy confundido… de pronto, como un regaderazo de agua fría, me golpea, me saca del trace pero a la vez me inserta en uno mas profundo, quisiera voltear a mi alrededor pero no puedo.
Una sensación de impotencia me ataca, y a la vez me libera… esto cada vez se pone mas extraño. Creí estar en mi habitación, pero las paredes súbitamente se derritieron y el infinito se presentó, pero porque siento que no tengo espacio?
Una vez mas, no es la primera vez que me pasa… desde pequeño esta extraña presencia me visita, me altera pero de una manera más primitiva me libera.
Ahora recuerdo fue después de mis primeros pasos como hombre, creo que fue la misma madrugada después de hacer el amor por primera vez. Como si hubiera puesto un anuncio en la cima del mundo. Como si anunciara a algo más atento que la mente humana, que de ahora en adelante estaba dispuesto a vivir de mis más profundos y carnales vicios.

Recuerdo que las primeras veces me resistía, al no comprender lo que me pasaba, de hecho aun no lo hago del todo. Pero ya empiezo a entenderlo y procuro dejarme ir, es menos frustrante que la sensación de estar paralizado totalmente pero con la mente más audaz que nunca. Como si fuera una droga fabricada como una broma de mal gusto.
Ya no se si me siento mas cómodo en la realidad a la cual le soy indiferente, o en mi mundo paralelo que cada día me espera para continuar de noche.
No hay escapatoria. Síndrome de Estocolmo? No por favor! Creo que aun no he superado el primero… sin embargo me siento obligado a decir que en esta vida de mediocridad es el único hecho que me sobresalta, y aunque no estoy seguro de querer deshacerme de ti, te agradecería que me dejes en paz, que me dejes descansar. Tu celosa presencia me excita de una manera perturbadora. Te amo, si tan solo fueras tangible.
Sinceramente tuyo: