De los libros de los cuentos, mi semblanza de tu signo, donde acaricio tu espalda q solas te conmueve, soy un bicho q baja de tu árbol, me poso en tus manos y canto un susurro con mis alas acarician tus oídos, a solas pero no tan sola, porque mi canto acompañará a siempre a esos fantasmas de tu vientre, y si tus lagrimas me ahogan viviré donde tu quieras verme, en mis manos esta tu vida y en mi vida esta tu corazón presente, no llores mi niña, no llores porque estoy contigo, abrázame fuerte cigarra y con cariño, porque en la ternura de tus manos yo me poso y finjo, q la luna no es de queso ni mi corazón de cristal pulido, acaso eres un ángel dormido, solo el sueño de un bicho, q recordó q en tus manos la soledad no existe, y en el calor de tus dedos encontré ese mundo perdido q en el árbol mas alto solo dejaba caer pequeñas gotas de lluvia en tu cabeza, sombría es mi respuesta, ante la vida, pero yo soy tu luciérnaga, aquella q brilla cuando tu mas lo necesitas |