Soy tantos gritos dentro de un único ser.
Tantos recuerdos,
tantas amalgamas de nostalgias y
vapores extinguiéndose
al final de la humareda distante,
gravitatoria.
Tantas violaciones,
tantos crímenes;
tantos asesinos sin huella.
Un suspiro y un pétalo caído.
La perfecta combinación de la herida hecha alivio.
Texto agregado el 08-09-2007, y leído por 132
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