En que mierda piensa un subgerente de finanzas tan rata, que su excesivo trabajo y bajo sueldo, no le permite arrendar un departamentito donde caer y recibir a sus hijos los fines de semana. ¿En escuchar su música? y caminar desde la casa de sus padres, ya viejos, a la que era su casa. ¿En imaginar una reacción positiva de su reciente ex mujer? ¿En alguna putita con la cual endeudarse?, ¿en darse un gusto con un ipod? O a lo mejor, su mente se va a los problemas que hay que llegar a enfrentar, o en preguntarse por que chucha seguir cuidando intereses ajenos, o recordar las risas y abrazos de sus hijos aún pequeños, y seguir cuidándolos, y no endeudarse. El punto es que, da lo mismo, porque a nadie le puede interesar lo que piensa un transeúnte cabeza gacha y audífonos en los oídos, cuando vas peleando con tu mujer en el auto, por puras guevadas, camino a dejar a los niños al colegio, donde las reacciones de otros apoderados se interponen como una prueba de tu sociabilidad, cuando en realidad tu estás pensando en pasar, cuando te lleven a la pega, a pegarte una cachita con tu mujer, que aún que gritona y mal genio, está harto rica y te gusta chuparle su zorrita exquisita, pero cuando estás disfrutando de eso, te aterrizan recordando, la pelea, la mala cara, la expresión de, chucha, como es posible este gueón, que está peleando conmigo, ahora me mire caliente, que se creé, si todos los hombres son iguales, lo único que les interesa es eso, ni se da cuenta que estoy a punto de deprimirme, que estoy cansada, que he aguantado tanto, ah, que bueno, ahí está la periquita los palotes, tendré que esperar parado al lado un rato, ahí esta mi niña sonriéndome, Hola princesa, la saludo con la mano, qué ganas de poder ir al gimnasio,…. , y, mis papitos de nuevo se pelean, y no me prestan atención, y solo a mi hermanito, por qué a mi no, por qué se pelean, no déjame hermano, ….., ni mi hermanita me quiere, yo mejor me meo como cuando guagua.