Cadenas de rosas

Y seguiré caminando errante
Por los senderos de las dudas
Vacilantes mis pies, mi cuerpo cae
Algo me ata, rosas me envuelven

Rosas rojas y negras son mis cadenas,
De pétalos suaves, mas espinas hirientes
Me obligan a aferrarme a todo,
Lo que más amo, lo mas confuso,
A los deseos imposibles
Al tiempo ya muerto.

Dulces pétalos acaricien mi piel
Y díganme que no es un error
Aferrarme a estas cadenas
Que perpetúan mi mirada
Hacia una espera eterna
donde todo podría ser como era

¡aromas cálidos!
Que saben a nostalgias
De tiempos de alegrías y dichas
Tan lejanas....

Decido entonces mirar al frente
Como siempre había temido
Buscar felicidad en mis pasos
Y en los paisajes de este camino

Guardé en mi corazón
Los bellos momentos ya vividos.
Miré entonces, como un sabio,
Un sabio recién nacido
Que vive todo como si fuese
El primer respiro

A mis ojos les volvió el brillo
y las cadenas que me ataban
fueron la energía de mi esencia
que danza en un mar de vida,
fluyendo y forjando sus corrientes

Hoy mi corazón
Es solo de un tiempo eterno,
Que con pasos ligeros y profundos
Le cuentan a las rosas y al mundo
Que las cadenas no son tales,
Sino que son la energía y los lazos
Mas plenos de amor que viajan
Danzando en el infinito