Este dia es especial, es nuestro aniversario; han pasado justo 2 años desde que terminamos, pero hoy ,16 de junio, algo es diferente. Pasare este dia junto a ti, junto a tu recuerdo, para hacer lo que nunca hicimos.
Me despierto y abro los ojos, te veo una vez mas junto a mi, no me muevo para no despertarte pero te veo con detención, te recorro con la mirada de pies a cabeza, te veo a ti y tus hermosas facciones, tu ojos cerrados , tu pelo despeinado y todas las otras pequeñas imperfecciones que te hacen perfecta. Una lagrima dulce cae por mis pómulos, no porque te extraño sino porque es la imagen mas bella que he visto en mi vida y te observo o mejor dicho, te imagino durante un buen rato. De repente abres tus ojos y me sonríes y yo te sonrío de vuelta “Duerme, te tengo una sorpresa”. Con la emoción de un niño en navidad corro hacia la cocina y con todo mi cariño intento preparar un desayuno digno de la ocasión, luego de un instante vuelvo a la pieza con un bandeja y “ taran!”. Tu ríes como siempre, sobre todo porque sabes que no se cocinar ni siquiera unos fideos, luego pongo mi humilde plato en tus piernas y me dicen “ooh que rico”. Te tomas tu café helado y mi selección especial de tus frutas favoritas y nos acostamos en la cama a “regalonear”, me fijo que entre las persianas se escurre un precioso dia y pienso que el sol se ha despertado para darnos un regalo en pleno invierno. Pasan las horas volando mientras estamos en la cama acurrucados, me levanto y pongo en el DVD nuestra película favorita “las sorpresas recién comienzan” te digo mientras mi corazón se acelera de solo verte una vez mas acostada en mi cama aunque sea en mi recuerdo.
Es hora de levantarnos, vamos al baño y nos duchamos juntos, nuestras almas caen desnudas al vernos como dios nos trajo al mundo y comenzamos a reír y a lanzarnos agua con las manos en tono juguetón. Luego nos vestimos y salimos a caminar por el parque que queda cerca y pienso “como nunca habíamos hecho esto antes”. Nos topamos con un hombre y una mujer acarreando un coche y bromeamos con tener unos hijos que nunca nacerán, con una boda que nunca se llevara a cabo con unos invitados que nunca llegaran y una banda que nunca tocara y seguimos nuestro rumbo, caminando, sin cansarnos y caminamos horas y horas de la mano. Mis manos empiezan a sudan pero no quiero soltarte, no ahora que por fin te tengo de nuevo. El sol empieza a caer y nos sentamos en un banco a ver la puesta, el viento comienza a soplar suavemente, te siento tiritar y te abrazo fuertemente, algo dentro de mi pecho empieza a surgir lentamente, pasa por mi garganta y sale como una bomba por mi boca “TE AMO, te amo demasiado, no podría vivir sin ti” tu me miras, no dices nada y sabes que si me dices “te amo” no te lo creería.
Llegamos ya caída la noche a mi departamento, nos acostamos en la cama y hacemos el amor por última vez, luego nos acurrucamos nuevamente y hablamos durante horas, al igual como lo hicimos la primera vez que te bese. De repente comienzas a desvanecerte y como humo desapareces de mi pieza y comienzo a extrañarte nuevamente, pero le digo gracias al cielo, gracias por el mejor dia de mi vida, gracias por haber estado conmigo una vez más… aunque sea en el recuerdo.