Fue entonces cuando ya no tenía ganas de ver a la gente feliz. Podría hacerme un ovillo y abrazarte a ti hasta que se acabe el mundo. Podría olvidar que el mundo existe, y que yo existo tambien, pero de ti no puedo olvidarme. Por que existo por que existes. si no no tiene caso
Texto agregado el 02-09-2007, y leído por 100 visitantes. (1 voto)