Sectus. El clan de la Rosa negra.

El conclave oscuro.

El conclave buscaba mantener la frágil tregua de casi 100 años de los seres obscuros. Las diferentes familias y clanes se habían servido de esta para fortalecer sus posiciones terrenales y consolidar su poder. Los representantes de los siete grupos más poderosos de vampiros se reunían en el penthouse de una de las corporaciones con mas influencia política a nivel mundial para zanjar diferencias y resolver misteriosas muertes y continuar la paz o desatar una guerra que ocasionaría terror y muerte en el mundo de las sombras.

El clan que convocaba era el Fíndelz el cual tenía un gran poder político y controlaba grandes trasnacionales. Otro de las familias presentes eran los Proesten los cuales tenían gran control en la industria del espectáculo, dueños de las grandes compañías de teatro, productoras de cine, y con una buena tajada en la industria musical teniendo bajo su nomina a los mejores artistas contemporáneos. De igual forma se encontraban los Formils, guerreros con gran poder en la industria militar, sus generales comandaban a varios de los mejores ejércitos del mundo. Asistieron los Hermaris que eran científicos y su poder lo concentraban en los grandes laboratorios y en la industria farmacéutica mundial, dirigían grandes investigaciones. Los Sislians se enfocaban a controlar el crimen organizado, drogas, prostitución y asesinatos a sueldos. Los Iglosec tenían gran influencia en las grandes religiones, expertos en fanatizar humanos a su conveniencia. Por ultimo asistía el clan de los Antiguos, los cuales se movían de forma oculta a la usanza de los primeros seres oscuros.

El único clan que no asistía era el de los Morks, anarquistas dispuestos a regirse por sus propias leyes pero en los últimos años se habían mantenido de forma invisible y no se conocía de actividad alguna de su familia.

Entre los clanes desde el inicio de la tregua existió cooperación, los Fíndelz financiaban a los Hermaris y a los Proesten o, invertían en la industria militar controlada por los Formils. Cuando se trataba de trabajos más sucios todos acudían a los Sislians. Los que se mantenían viviendo de forma más autónoma eran los Iglosec y los Antiguos. Todos tenían el don de la persuasión avanzada, y podían convencer a grandes grupos de que los aceptaran, incluso como lideres en sus ramas aunque también ocupaban mandos medios o bajos o se mantenían tras las sombras. Teniendo un fuerte control mental sobre los seres humanos y sus lideres. Podían vivir a la luz del día, pero sus poderes eran mucho menores. Los Antiguos se negaban a aparecer en la luz del día ya que violarían la vieja tradición. Todos tenían una presencia elegante y sofisticada, con mirada penetrante y una actitud de fieras conteniendo sus instintos.

Por la noche su fuerza física era diez veces mayor, tenían el don de volverse sombras pero era muy desgastante para sus cuerpos. Bebían sangre humana, pero uno de los acuerdos de la tregua era que no la bebieran directamente de los humanos ya que los Iglosec, y los Hermaris se oponían, estos últimos abastecían a todos de litros de sangre que juntaban en campañas masivas de donación financiadas por los Fíndelz. Eran inmortales, solo si se les arrancaba el corazón o la cabeza dejaban de existir.

Tenían como enemigos mortales a los Lizianz, humanos con varias generaciones dedicadas a la caza de los seres de la noche los cuales actuaban en forma de secta y cargaban espadas o dagas para combatir a estos, tenían un centro de inteligencia que buscaba detectar a los vampiros en sus diferentes ámbitos de influencia.

Siglos de guerras y dos largas treguas marcaban su historia, las diferencias de cómo tratar con los humanos había desencadenado varias de las batallas. El control por el mundo de la noche y de los clanes eran detonadores de otras. Finalmente se había logrado una especie de consejo que tomaba las decisiones consultando a sus familias, y una convivencia tolerada con los humanos, sin dejar de haber menosprecio a la vida de estos por parte de clanes como los Formils, los Sislians y los Antiguos, los Fíndelz eran mas pragmáticos con respecto a los humanos. A todos se les permitía actuar en legítima defensa contra los Lizianz.

Los temas a tratar eran la ratificación de los acuerdos de la tregua, el asunto de los Morks y el problema de los Lizianz. Pero uno mas fuerte era el de las muertes masivas de humanos en zona de influencia de los seres oscuros y la desaparición de miembros vampiros de cada uno de los clanes.

Cada uno de los vampiros reflejaba en su personalidad a lo que se dedicaba con estereotipos muy bien marcados. Folmart del Clan Fíndelz abría la sesión, todos los representantes de los clanes tomarían la palabra, los Formils dirigidos por Graco, proponían tomar la ofensiva contra los Lizianz y los Morks, claro, toda propuesta se llevaría a votación, los Iglosec y los Hermaris proponían que siguiera la tolerancia contra los humanos civiles y la veda hacia los humanos. Los representaban Santis y Antis respectivamente. Nostreus dirigía a los Sislians y le preocupaba la desaparición de vampiros y la muerte de humanos, pero no quería aseverar que alguien ya había roto la tregua, sospechaba más de los Lizianz y de los Morks y proponía que saliera una comisión del conclave que investigara los hechos. Los Antiguos dirigidos por Bladco estaban a la expectativa.

Finalmente quedo que se mantuvieran los acuerdos de la tregua pasada, mas se investigarían los hechos por una comisión encabezada por Vetmol del clan Hermaris ya que se les consideraba metódicos y observadores y hasta no tener los resultados en un mes, no se actuaría contra nadie.

El conclave tomaría un receso de un mes para ver los resultados.

La investigación

Vetmol investigaría los campos de acción de todos los clanes.

Visitaría y pondría bajo vigilancia los lugares de vicio y las mansiones de los Sislians, sus actividades no eran para nada pacíficos ni morales pero no detectaba que hubieran roto la tregua. Seducían y prostituían a seres humanos pero no los abrazaban, o sea no les chupaban la sangre.

Vigilando a los Fíndelz, vería su actuar frío y calculador, corruptos y manipuladores, y explotadores de los seres humanos pero sin pasar los límites marcados por las tregua.

Los Iglosec manipulaban a sus seguidores a su modo, incluso lograba que se enfrentaran entre ellos pero no actuaban directamente. Manipulaban sentimientos y voluntades pero sin romper los acuerdos vampíricos.

Los Formils eran sanguinarios y alentaban guerras y complots entre los países. Violentos y dominantes pero se mantenían en una tenue línea si romper la tregua.

Los Proesten vivían en una combinación de mundos, entre el arte y la depravación. Destruían almas y egos pero también creaban ídolos y obras maravillosas. Pero nada indicaba que pasaran el límite de lo acordado con las familias.

Los Antiguos eran los más discretos y difíciles de investigar, disciplinados y malhumorados, durmiendo en sarcófagos y con un gran desprecio hacia los humanos. Pero eral leales y cumplían sus compromisos y no romperían la tregua.

Vetmol mantendría la vigilancia a los clanes pero enfocaría sus esfuerzos hacia dos grupos más peligrosos los Lizianz y los Morks.

Con la ayuda de los soplones de los Sislians lograría averiguar la ubicación del nido de los Morks. No seria fácil acceder a ella ya que el riesgo era bastante grande, si lo descubrían su vida correría peligro, convertido en sombra penetro la guarida sin encontrar rastro de sus ocupantes hasta abrir una puerta en ella se llevo una desagradable sorpresa. El cuarto estaba lleno de cadáveres de vampiros. Todo el clan de los Morks yacía como si les hubieran succionado el interior de su cuerpo, sin color y con una rosa negra en su pecho. De pronto un ruido lo hizo voltear hacia la salida del nido, vio salir a un humano con una espada corriendo a toda velocidad, era un Lizianz que se alejaba a toda velocidad. Con habilidad sobrenatural Vetmol inicio la persecución siguiéndolo con saltos asombrosos y manteniéndose a una distancia discreta, lo siguió hasta la entrada de un templo.

Entro de forma sigilosa pensando en la forma bestial en que los Morks habían sido asesinados, pensó que los Lizianz estaban usando un poder mas sofisticado para acabar con los vampiros. En eso sintió la presencia de varios cuerpos rodeándole, varios Lizianz lo amenazaban con espadas apuntando al corazón y al cuello. Pensó que su hora había llegado, mas un hombre en la oscuridad grito -¡amagenlo!, lo quiero vivo-. Fue amordazado y llevado a una sala de interrogatorios.

Los humanos lo golpeaban y le preguntaban por la muerte de los Morks y por los nuevos poderes de los vampiros, Vetmol solo gruñía y pensaba, -hipócritas, malditos asesinos-

Cuando de pronto afuera del cuarto se empezó a escuchar sonidos de batalla sus torturadores salieron a responder a éstos, él aprovecho para convertirse en sombra y quitarse de sus ataduras, al salir vio los restos de los Lizianz muertos, succionados. Solo encontró agonizando al humano que vio salir de la cueva de los Morks. -¿Quien lo hizo? Cuestiono al humano. El Lizianz solo alcanzo a decir –Sectus- cuando se desvaneció y su cuerpo quedo vació y sin vida. De las ropas del humano saco unos papeles que lo identificaban como investigador de los Lizianz y tenía unas anotaciones que decían: Clan de la Rosa Negra, Hermaris.

Tomo su cuerpo y lo llevo hasta los laboratorios de los Hermaris, le pidió a Romel, un ratón de laboratorio que le hiciera la autopsia y le entregara cuanto antes los resultados. Mientras el, volvería a la cueva de los Morks por mas evidencia. Al llegar se sorprendió al ver que los cuerpos habían desaparecido. Decidió regresar par esperar los resultados cuando de pronto una flecha le perforo el hombro, en las sombras vio alejarse la silueta de un vampiro, -traición- pensó el, intento seguirlo pero estaba demasiado débil, no tanto por la herida en el hombro que le sano rápido sino por sus conversiones en sombra. Prefirió dirigirse de vuelta al laboratorio, se encontró con Romel y el tembloroso le dijo -no te avisaron-, me prohibieron proseguir con la autopsia. -Quien diablos hizo eso, le grito furioso- -Fueron ordenes superiores- -Fue Antis-. Vetmol aventó a Romel y se dirigió al cubículo de Antis, gritándole –como te atreves a interferir en una investigación ordenada por el conclave- -Tranquilízate respondió Antis, tendrás tus respuestas, acompáñame.

Se dirigieron a unas excavaciones, ubicadas en unas viejas ruinas pertenecientes a una antigua civilización humana, en ella había un improvisado laboratorio. En las paredes habían pintados humanos adorando a seres con mayor fuerza física que ellos y también se veían rosas negras esculpidas. –Que es esto pregunto Vetmol-. -Calla y escucha- contesto Antis.

-Hace un año aproximadamente coordine una investigación secreta sobre una antigua secta de vampiros, la mas antigua mejor dicho, y por lo mismo la mas poderosa, era dirigida por Dromelsku, eran conocidos como Sectus, tenían una fuerza superior a la de cualquier vampiro, tenían el don de sanar pero también de abrazar sin necesidad de beber la sangre sino que succionado y apoderándose de la energía, tanto de humanos como de vampiros a los cuales controlaban, dándoles vida o quitándosela actuando como dioses. Una unión entre los otros clanes de vampiros y los humanos desencadenó una rebelión que derroto a los Sectus, matándolos a la mayoría y congelando a los mas poderosos encerrándolos en las catacumbas de estas ruinas, que gracias al conocimiento de los clanes mas sabios lograron formar pirámides que nulificaban con energía de todos los elementos naturales el poder de los Sectus. Nosotros abrimos una de las catacumbas para estudiar la fuerza de estos seres y utilizar sus poderes energéticos para bien de la humanidad. Experimentamos con el cuerpo de Dromelsku y sin saberlo lo fortalecíamos e incrementamos su fuerza. Entonces el renació y destruyo los campos energéticos reviviendo a los otros miembros de Sectus-.

-Pero por que no lo detuvieron- exclamo Vetmol -por que no avisaron al conclave-. Antis lo volteo a ver y le contesto –Lo hicimos por el bien de la evolución y por la sobrevivencia de este mundo que se pudre a pedazos.-Es la única forma de acabar con la farsa de los humanos y los vampiros- -están destruyendo al mundo que conocemos, Sectus y nosotros, la elite de los Hermaris limpiaremos al mundo de la escoria vampírica y los humanos que no merezcan salvación. -¿Por qué seguir con el conclave?- pregunto Vetmol. –Por que gracias a ti y al conclave daremos el golpe maestro contra las otras sectas- contesto malévolamente Antis, tu informe romperá la tregua y pondrá a las familias unas contra las otras. Acabaremos con el suministro de sangre y se romperá el acuerdo de convivencia con los humanos, destruiremos los que sobrevivan y elegiremos a los mas aptos para convertirlos y fundar con ellos el nuevo reino de la oscuridad. Vectus contesto desquiciado –yo no colaborare con ustedes, están enfermos de poder, no son la cura si no lo que hará mas grande la podredumbre en este mundo-

-No tienes alternativa- contesto Antis -te controlaremos y tu voluntad será la nuestra- Vectus golpeo con todas sus fuerzas a Antis y se dirigió a la entrada, pero alguien le impidió salir, sintió como su cuerpo quedaba inmóvil y sus poderes se debilitaban, un ser poderoso se apropiaba de sus sentidos y su cuerpo, perdía su voluntas. Sin poder impedirlo todo el era controlado por Dromelsku y quedaba atrapado en su propio cuerpo sin poder actuar ni advertirle a nadie. Su pecho quedaría marcado con una rosa negra.


Fin de la tregua.

El plazo se había cumplido, los clanes se reunían para escuchar el informe de la investigación de Vetmol. Los representantes tomaron su lugar. Vetmol llegó acompañado de Antis. Folmart le cedía la palabra a Vetmol. El informe los enfrentaba uno contra otra otros. La furia contenida empezaba a desatarse. Solo Bladco mantenía la calma pidiendo que se guardara la cordura, que no se precipitaran. En eso Graco, en un rápido movimiento y de un solo golpe le arrancaba el corazón a Folmart y empezaba una batalla entre los líderes de los clanes. El hábil Antis se puso a salvo viendo como se mataban entre ellos, al final solo quedaban de pie Vectus, Bladco y Antis. Bladco con la guardia en alto le pedía una explicación a Vectus quien en ese mismo momento era degollado por Antis. –Maldito traidor tú planeaste esto- dijo Bladco cuando se disponía a acabar con Antis pero en ese momento era detenido por la fuerza superior de Dromelsku quien lo sometió y succiono su energía. Bien echo menciono Antis ahora la guerra se desatara, y dominaremos el mundo oscuro. –Así es- contesto Dromelsku quien tomo del cuello a Antis hasta reventárselo –Pero tu no estas invitado.-




La guerra.

Los miembros de las familias pronto supieron del fracaso del conclave y se prepararon para la guerra.

Los Formils desataron todo su poderío militar provocando golpes de estado e invasiones, desestabilizando los países controlados políticamente por los Fíndelz, torturando y degollando a los miembros de los otros clanes. Estos cortaron toda ayuda económica a los diferentes clanes. Los Sislians, inundaron las calles de drogas envenenadas matando y atentando con todo su poderío contra los humanos y los otros vampiros. Los Hermaris cortaron todo el suministro de sangre y desarrollaron armas bacteriológicas que debilitaban a las otras familias. Los Iglosec desataron guerras santas y fomentaron el odio de sus seguidores para que atacaran a los otros clanes. Los Proesten utilizaron la influencia mediática que ejercían para fomentar el odio contra sus enemigos y manipular a las masas para que sirvieran a sus causas. Los Antiguos utilizaron las añejas tácticas de los viejos vampiros y abrazaron a cuanto humano pudieran para ensanchar a su ejercito, se movían en la oscuridad y a la par investigaban lo que ellos consideraban había sido un complot organizado por una poderosa fuerza oscura.

Los Lizianz que sobrevivieron mataban a cuanto vampiro encontraban a su paso mientras investigaban que había desatado esa hecatombe.



LA ALIANZA

Esta guerra genero un pandemonium en la tierra. Los clanes llegaron casi a su extinción total. Los mas afortunado fueron los Antiguos quienes tenían mayor habilidad para sobrevivir, Los humanos se volvieron comida de los vampiros o esclavos de los Sectus, otros se unieron a la resistencia encabezada por los Lizianz. Los antiguos con su experiencia y perspicacia entendieron lo que había ocurrido y acordaron reunirse con los Lizianz los cuales en base a sus investigaciones habían llegado a las mismas conclusiones, Sectus el Clan de la Rosa Negra tenía el control y había provocado todo.

Decidieron formar una alianza y advertir a los vampiros sobrevivientes invitándolos a la rebelión contra los Sectus. Los humanos sobrevivientes donaban sangre para alimentar a sus nuevos aliados. Juntos buscarían la forma de rescatar al mundo y crear un nuevo orden en que los humanos y los vampiros vivieran en armonía. La guerra sería larga pero con las fuerzas combinadas podrían dar batalla a los poderosos Sectus. Los enemigos a muerte se aliarían contra el enemigo común

La guerra duro 100 años y con sabiduría y con las enseñanzas de la primera alianza contra los Sectus lograron acabar con ellos, el ultimo en caer sería Dromelsku quien acabaría siendo degollado por Lod el jefe de la rebelión, mientras Marcus jefe de los vampiros lo sometía dentro de una pirámide energética.

Ahora se debía construir un mundo mejor, no sería tarea fácil se deberían acabar con los errores del pasado, el consumismo atroz, el crimen, el fanatismo y el abuso de la ciencia sobre la naturaleza, no habría mas manipulación ni enajenación de las mentes. Se pondría fin a las guerras y los vampiros y los humanos aprenderían a convivir en paz. Los Antiguos escribirían las memorias para que nunca se olvidara que el mundo estuvo a punto de desaparecer por causa del mal de humanos y vampiros y lucharían por que la paz y el nuevo mundo se mantuvieran por mucho tiempo.