Mil veces mil, seguiré luchando,
aquí, en el mismo lugar
que eligió Dios para juntarnos.

El ser malvado que vivió en mí, no ha muerto,
seguirá por siempre vivo en tu recuerdo.
Morirá conmigo cuando muera mi cuerpo.
Pero ahora y para siempre te prometo
dejarlo para siempre cautivo en mi remordimiento.

Mil veces mil, pagaré lo que nos ha hecho
matarte en vida y dejarme prisionero,
en este cuerpo por la culpa atormentado .

Mi voluntad como la sinusoide de tu alma,
Fluctuará por la amargura y por la calma.
Las culpas vendrán, como la aurora,
Las lagrimas secas correrán por tus cara
y en cicatriz se tornará la herida cerrada.

Mil veces mil , seguiré a tu lado,
Demostrándote que ese ser,
ya no es más que un mal recuerdo