No me gusta esta palabra, pareciera que da derecho de condena al hijo de puta que la usa.
...
A pesar de ello es necesario aclarar que la relación del ser humano con las plantas mágicas, de poder, drogas (naturales), etc. es lo más primordial y originario que le cabe al ser humano en su existencia en este planeta. Y esa relación siempre será un misterio, un peligro, de vaivenes altos y bajos y nunca un prolema resuelto de manera definitiva. Porque el tema de la relación entre el ser humano y algunas substancias no es otro que el de la donación de conciencia, sacralidad de la existencia, razón originaria y primordial. Y todo ello, como vemos actualmente, es sumamente peligroso - sobretodo cuando como especie nos hallamos sometidos bajo el imperio de otra conciencia que bloquea la nuestra humana: la conciencioa del insecto, con su cabeza cuadrada a la que llamas televisor, con su mosquito al que llamas satélite, con su lombriz a la que llamas metro, con su colmena a la que llamas edificio, con su chiripa a la que llamas carro, con su hormiga a la que llamas moto, con su escarabjo al que llamas tractor, con su oruga a la que llamas autobús, con su libélula a la que llamas helicóptero, con su mundo al que llamamos nuestro.
|