Si pudiera

Si pudiera darte ese trozo de alegría que me falta,
mi pequeña lágrima donde cabe la angustia;
si mi gozo cupiera en la mano de dios
si entendieras que tanto me cuesta este amor ,
y no por el dolor que desborda los contornos de los huesos cuando sangran el deseo palpitante en el suspiro,
no es que cueste nombrarlo ni nombrarte, ni nombrarnos
cuesta el grito callado en el silencio ,
el tremolar del beso sigiloso en ese borde la cama que pide.
Si acaso existiera la palabra donde colocar la risa del jilguero que anida placido y fecundo en el nido vacío.
Y mis polluelos desaforados y redondos llaman al vuelo de tus ojos,
a la piel canina que salvaje espera en un rincón para dar el zarpazo.
Mira ahora mis pezones también ríen de gozo al trepar el roce de la rosa en tu pecho.
El ombligo acobardado se esconde dentro de ti
Y me hundes en saliva, espuma y lluvia.
Porque llueve amor dentro mío
Y este espasmo que no digo pero lo canto
Existe, si existe…
Lejos unas sanguijuelas copulan libres
Y mis celos crecen como un torrente
Y quisiera ser sanguijuela,
libertad,
copula,
sonido,
infancia, privilegio,
para bañarnos de complacencia
Y complacerte hasta que me deshaga
del hartazgo de hacerte eso que se llama
pero que no nombro,
ni te nombro,
ni nos nombro.
El deseo canta y mis pezones trepan la montaña
Y tu saliva en mi pubis de amapola negra
Y la lluvia..., y ahora llueve
Y sigue lloviendo…
mas no nombro la lluvia...