Dónde que...
Hoy no, te encuentro escurridiza.
Te has escapado del caparazon. Ni las esquirlas de la razon han quedado en tu interior.
Estatica, tiesa, tal sombrero descalzado ya no te encierra.
Dispersa te estás aproximando...
Quédate un rato, acurrucate junto a mi.
Texto agregado el 18-03-2004, y leído por 199
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