El complejo turístico BORA BORA NOI, se encuentra en uno de los más recónditos lugares de nuestro planeta; a mitad de camino entre Nueva Zelandia, Japón, Hawaii y Chile: en el corazón del Océano Pacífico.
Pero, como sabemos, el camino a la felicidad es largo y difícil, en especial bastante caro.
Se comienza tomando un avión desde Los Ángeles(E.U.) rumbo a Papeete, capital de Tahití, que viene a ser la isla más grande de la Polinesia Francesa.
La primera noche es necesario pernoctar en la ciudad, pues el Ministerio de Turismo local, arregló todo en forma tal que las salidas aéreas hacia los lugares turísticos no concuerdan con las llegadas de los aviones del extranjero. Muy entendible, ¿no?
A la mañana siguiente se les permitirá tomar el vuelo a BORA BORA.
Después de una hora de vuelo en el cual no dejarán de asombrarse con paisajes vistos a través de las ventanillas se llega a destino.
En el pequeñisimo aeropuerto los esperarán representantes del hotel, quienes le colocarán alrededor del cuello guirnaldas de orquídeas naturales(muy mono) A cada visitante se le adjunta su vallet(en la mayoría bellas nativas) personal que los acompañará durante la estadía. Desde aquel momento vuestra función será sonreír. Una lancha a motor-taxi los conducirá al hotel, por el mar por supuesto.
Las suits están provistas de: antesala; living; dormitorio con cama de tres plazas, sobre la cual pende desde el techo un manto de una seda transparente(dícese que para los mosquitillos); un baño completo con todo lo imaginable y algo más, del tamaño de un funcional amplio; pieza de trabajo, con todos los implementos de comunicación modernos; y por último como postre: una terraza-balcón inmensa desde la cual se baja al mar.
Detalles para completar el sueño del pibe: los pisos del living y del baño son transparentes, para permitir, cuando se les ocurra, observar el ir y venir de los cientos de pececillos multicolores que abundan en aquellas aguas.
El lugar más placentero es, sin duda, la terraza-balcón, les brindará el deleite de introducir los pies en el agua fresca del mar y conocer a los peces en su hábitat.
El servicio del hotel se ocupa hasta de los detalles más pequeños. Por ejemplo: junto a la escalinata particular rumbo al mar, estará esperándolos una ducha para después de haberse sumergido en el agua salada. Otro significativo gesto: en el ropero, en un costado, tendrán preparado todo lo necesario para realizar el buceo; y además, por las dudas, capas de lluvia acompañadas por sus respectivos paraguas.
El día de la llegada, casi me olvidaba, aguardará vuestra llegada a la suite una refrescante botella de champaña, mas una gloriosa fuente de llamativas frutas exóticas de producción local, que diariamente serán renovadas.
Existe un pequeño problema con lo relacionado a la comida. Según los conocedores, los tahitíanos no sobresalen en lo que a arte culinario se refiera.
Con respecto al desayuno es posible recibirlo en la suite(160 de los verdes). Llegará transportado en canoa y será servido por vuestra valett personal, ataviada con las ropas típicas.
EL hotel consta de tres esplendidos restaurantes, cada uno a su estilo. No obstante es aconsejable, por lo ya comentado, viajar en lancha-motor(sin costo) hacia la Isla Mayor, encontrar un almacén y allí adquirir unos quesos franceses, unas buenas flautas y por supuesto un vino para bajar los alimentos. Todo ello les costará una cuarta parte de lo requerido en los restaurantes mencionados. Sientense en la terraza-balcón y disfruten de un hermoso piknic nocturno bajo un limpido cielo alumbrado por miles de estrellas (romántico y aconsejable).
Si les apetece un poco de sport: un interesante paseo alrededor de la Isla Mayor, con sus 36km de perímetro, no les vendrá mal.
Pero la principal atracción sin duda es la suite; y la razón única para abandonarla es el atractivo buceo por la laguna alrededor de la misma.
Dato Interesante:
Para los que preguntan el precio, decididamente estos paradisiacos lugares no son para ellos.
Pero, sospechando la curiosidad que esta nota produjo, les mando una ayudita: los precios empiezan desde los 1.200 verdes por pareja-noche, llegando hasta los 2.500.
Es aconsejable pedir ubicación por intermedio de Internet. Eso si, el pago entonces sería por adelantado, sin posibilidad de anular, pero el precio desciende a sólo 600 dolares.
¡BUEN VIAJE Y DISFRUTEN DE VACACIONES!
@surenio
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