Hoy compadezco a mis fieles hermanos
que han concurrido a esta humilde ceremonia.
No seremos más ni seremos menos,
solo caras tristes en un velatorio mortal.
Hoy compadezco a las rosas,
porque juntas han dibujado una alfombra.
Una cubierta albirroja sobre la ceniza,
sobre la mordaza y las hojas verdes de este invierno.
Y yo con mis colores y mis risas
contamino ese espacio pulcro y conspicuo,
con mis juegos y mis virtudes,
con mis algarabías y sentimientos.
Hoy intento contagiar a todos el cinismo
y la alegría de no tener otra más,
Hoy compadezco al epitafio
y al creativo incoherente que escribió
"Aquí yace sin lamentos, sin oportunidad.
Aquí yace otro grano de arena, sin penas,
sin glorias, sin verdad"
Hoy río y me confundo
pues nadie parece verme
todos pasan de largo
como si fuera un vagabundo,
una obra de arte en la alameda,
un basurero en la playa,
un pequeño perdido entre la muchedumbre.
Hoy canto, bailo y rezo
soy un payaso de funeral.
Mis ojos brillan enmudecidos
Y la lluvia traicionera
retira el maquillaje blanco de mi rostro.
Hoy fiordos blancos caen sobre mi cara
dibujando figuras extrañas
signos sobre el horizonte.
Mis carencias se vuelven mis fortalezas,
esta pena ríe a carcajadas
y volátil, etérea
esta sonrisa encanta sin saber
que para vivir hay que soñar
y el que no sueña,
simplemente se muere
y de esta verdad universal
no hay más vuelta atrás.
Hoy agradezco a todos los asistentes
el show ha terminado, ya tiene fin
este payaso de funeral ha concluido
nada más queda, historias, deseo
un crepúsculo morado, húmedo
los últimos rayos del sol ansioso
por fin me dejan ir.
Payaso de funeral...
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