voy a la deriva. soy un navegante solitario en el mar de la locura cotidiana. vivir es un arte y un milagro, y yo soy un error con un timón enfermo. aprendí desde pequeño que las palabras son el más preciado tesoro del ser humano. sin embargo aborrezco la comunicación con mis semejantes. navego solo en mi velero de fármacos y coca. a veces, como ahora, siento tanto dolor de existir que las lágrimas abrasan como lava. siento la necesidad absoluta de autodestruirme, y por otra parte algo dentro de mi más profundo agujero maldito me llena de apego por la vida que los demás vivís. ya no intentaré matarme más veces. dejaré mi funeral en manos del supremo. mientras amanece cada dia cargado de millones de azares que me ignoran, recurro a lo que puedo y me alivia, y es la nada la nada más absoluta y sin forma porque la nada es la forma y la forma es la nada.