Me cantaste en el idioma materno
y conseguí los trabajos imprescindibles.
Limpio los caminos, usando hasta mis manos,
cuando se que estas por llegar.
Un viejo reloj de cuerdas no marco el acto
ni el beso
ni la mirada.
Estoy aquí en tu espera
sin penas ni pesares pasados.
Y cuando decido retirarme
descubro el grillo que retiene mi corazón.
Texto agregado el 07-08-2007, y leído por 177
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Lectores Opinan
07-08-2007
Me gustó mucho. Sutil, cadencioso e inteligente. andrula
07-08-2007
Es un poema agradable de leer, con un gran remate. Felicitaciones. kamel
07-08-2007
esperar hasta una hora despues de que no llega, con los caminos limpios, con la casa limpia, es decir, el corazón...para que sea habitado solo por ese alguuien..es una gran virtud... Noc
07-08-2007
dices bien. con fuerza y desafio. no falta nada ni sobra nada. excelente dax
07-08-2007
es muy bueno y hermosa expresión
me encanta tu característico estilo tecclas