La implacable y dezlumbrante luna se escondía suave y ligera bajo las ramas de los arboles... claro era que nadie devía verla como estaba bestida esa noche... Solo su amante el más codiciado, que deslumbraba en las alfombras rojas de esa noche; se debian ver temprano pues él no tardaba en viajar al este...Pero la luna jamás llegó al punto donde se encontrarían esa noche... su amado debía partir, aunque jamás esperó tal traición...
Después de tanto intentar buscar, después de estudiar cada rastro de lágrimas que quedó en el suelo... Solo esperaría que calme la mar para seguir la busqueda... Nada queda más que intentar de noche...
Pero es lo que lo preocupa... la luna no lo saludo después de esa noche... lloró pues la lluvia no sezó en más de 3 horas... ¿Qué hice para que no me mires...? ¿Qué hice para no poder verte bailar junto a las estrellas? Se prengutaba.... Después de tanto, creo que ya se ha acostumbrado a que lo abandonen... Espero no tener que soportarlo, pues duele tener que verlo destruirse... Pues lo que siente ahora es más grande que el mismo cielo en el que juegaba ella a observarlo...