Sufría miles de tormentos,
delirios, noches de insomnio,
no tenía bellos momentos,
vivía un cruel infortunio.

Sus noches de pesadillas
sus días cruel realidad,
la envolvían las envidias,
la mataba la maldad.

Nació muy desprotegida
a pesar de tener dinero,
tenía lujos en la vida,
pero nunca un " te quiero"

Careció de abrazos y besos,
no había comunicación,
emezaron los tropiezos,
había mucha desilusión.

Su mundo era sin amor,
envidiaba a las aves,
platicaba con la flor,
cosa que tú ya sabes.

Fue creciendo sin consuelo,
sin la mano de sus padres,
sólo le daban dinero,
era lo más importante.

Empezó ella drogarse
y a consumir alcohol,
pensaba ella escaparse,
de su tyriste situación.

Poco a poco fue cayendo
en las garras del vicio,
su vida fue consumiendo
y se hundió en el precipicio.

Tirada estaba en la calle,
ahí yo la encontré,
empecé afrecuentarle,
a mi adorada Anabel.

La cobijé con cariño,
la envolví en mi ternura,
se arropó en ese niño,
en esa bella criatura.

han pasado ya los años
y no la he vuelto a ver,
algunos me han comentado
que es una triste mujer.

Consumida por las penas,
por su vida triste y cruel,
así camina en la acera,
mi adorada Anabel.

Nadie le tiende la mano,
vaya que cruel sociedad,
ella es un ser humano,
y la cambió la maldad.

Yo te digo mi poequeña,
aún es tiempo de cambiar,
y mi corazón sueña
con que te vas a rehabilitar.

Yo te doy mi corazón,
mi vida ha sido tuya,
también tienes mi bendición,
haremosque el mal te huya.