Supongamos que hoy hablamos, de ti
de tu pasión, fría y helada
más que un invierno en San Petersburgo,
y poco calida para las playa de Hawai


Es el silencio, tú maestro, allá en tu escuela
siendo tú, su mejor alumna, para callar tú corazón
pobre, corazón, lleno de agujeros
mas me dejo sin vida en un rincón.


Enemiga fiel de la ternura
no dejas de matar este cariño
y digo, viví por ti, ¡si eso es vivir?
supongamos que hoy hablo de mí.

Si el amor es un juego con un trago de vodka
esto esta muy bueno, fui tu mejor juguete
pero dejaste una lagrima, profunda en mi pecho
cuando volaste sin decir adiós.

Los asesinos como, tú:

Decepcionan cuando dejan caer un quizás,
y te falta valor para estar con amores baratos;
te pones triste y quieres ser
mi pan, mi vino mi dios
o tal vez, ese amor que nunca llego.

Hoy me escribes diciendo:

Quiero ser tu noche y tu día
te lo digo con el corazón en la mano
cantado, esperando a que bajes mi marea.

¡No soy un enamorado con la lágrima fácil!

Cumplí mi sentencia,
quiero vivir otra vida
conocer otros mares
tu cuerpo me alucina
pero lo dejamos para nunca mas.