Caminamos junto al mar,
nos recostamos en la arena,
tenía ganas de jugar,
con tu lindapiel morena.
Las olas iban llegando
tocaban tus bellos pies,
y mientras te iba besando
se me reizaba la piel.
El sol quemaba mi cuerpo,
así lo quiero creer,
el horizonte era abierto,
más no lo podía ver.
Las gaviotas revoloteaban,
el mar cantaba al oído,
y tus dedos jugueteaban
con mi cuerpo aún dormido.
Miles de arenas surcaron
por tu bikini azul,
y mis manos requemaron,
fue en mi lindo Playa Azul.
El agua cubrió los cuerpos,
llenos de sal y arena,
no importaba el tiempo,
todo valía la pena.
Escuchamos a lo lejos
el canto de una sirena,
y con los ojos abiertos,
te contemplé, mi morena.
Que día tan maravilloso,
nunca lo voy a olvidar,
soy muy feliz y dichoso,
contigo en este mar.
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