Vuelven nuevamente las palabras que nacen del corazón. Inspiradas por la ingrata tristeza y que dejo el temblor. Sin terceras personas, como siempre, solo somos tú y yo. Los dueños de estén innegable y renaciente amor.
Texto agregado el 12-07-2007, y leído por 102 visitantes. (0 votos)