Tomo esto de la metafísica de Aristóteles:

“La opinión corriente supone que el sabio a. conoce todas las cosas, b. que conoce lo más difícil, c. que su conocimiento es más riguroso (exacto), d. que es capaz de enseñar las causas; además, e. que la sabiduría es la ciencia por sí misma más deseada…” – Interrumpo aquí aun cuando f. es la más críptica de todas (“que la ciencia dominante, en cuanto a sabiduría, es superior a la auxiliar” – Interpreto esto último en términos heideggerianos en el sentido de que el ser-ahí es más importante que cualquiera de todos los demás seres posibles porque es el único que en este momento es actuante (dominante), etc… al final, mediante una cita ilustraré más esto). Leyendo y releyendo me atrevo a expresar dos aseveraciones: que d. es lo mismo que puede ser llamado brujería o chamanismo y quien logra enseñar las causas es solo el brujo, el chamán o el mago (Estamos tan perdidos ¿Podridos? que consideramos, ahora, al sabio como aquel que dice “trata de buscarle el lado positivo”); y que e. es la causa de que nuestros niños salten a las drogas… (¿en quien o a quienes recurrir en caso de esta necesidad planteada en e., a TELEVIDENTES?... ) … lo normal consiste es en buscar directamente lo propio, lo no distractivo, porque ante el deseo lo distractivo es muerte. Los adultos creen que sus respuestas son creidas por quienes preguntan, quienes preguntan preguntan al adulto para saber si es posible de él (o ella) fiarse Y SE HACE COMO SI SE CREE EN LA RESPUESTA… a partir de ahí y fuera de eso existe todo un mundo que nos dice que es posible hallar autenticidad bajo las piedras – Autenticidad (lo semejante busca lo semejante) – Razones suficientes, vamos a lo otro:

La cita:

“El ser-ahí – dice Heidegger – es en cada caso su posibilidad y no se limita a “tenerla” como una peculiaridad, a la manera de lo “ante los ojos”. Y por ser en cada caso el “ser ahí” esencialmente su posibilidad, puede este ente en su ser “elegirse” a sí mismo, ganarse, y también puede perderse, o no ganarse nunca, o sólo “parece ser” que se gana. Haberse perdido y aún no haberse ganado sólo lo puede en tanto es, por su esencia misma, posible “ser ahí” propio, es decir, apropiado por sí mismo y para sí”*

- Pero no debemos olvidar que nuestra cultura es hija del catolicismo y que este nos vendió un modelo y la culpa para quien no buscase imitar o pretender ser otro.

¿Quiénes se hallan en las trincheras? … y nos dirán que cadáveres (en realidad, sabemos, no hay trincheras… ¿o las ahí?)


*Mientras reescribo esto escucho a través de youtube.com “Joy Division - New Dawn Fades (live)” y me sorprende de qué manera ilustra las palabras de Heidegger