Una primavera... Una vez tembló la pradera desde no se sabe cuando en un día casi cualquiera de un tiempo no muy pasado. Casi nadie bien se percató ante el hecho inusual de que hasta el cielo vibró con el movimiento tal. Se alteraron las estrellas de la inesperada llamarada que surgían de las palabras en aquella inmensa morada. Se sonrojó hasta la luna por la liberada pasión de dos almas que fueron una en la precisa ocasión. Dos caballos desbocados que de noche se encontraron en el crujir de los lechos por el amor que se entregaron. Una vez fue primavera allá por San José del Maipo... Joan Bosch 25/06/07
Texto agregado el 03-07-2007, y leído por 92 visitantes. (4 votos)