¿Por qué los murciélagos son ciegos?


En los días antiguos, más antiguos que mi madre ( hace como unos 10.000 años), todos los murciélagos tenían ojos, negros como una noche sin estrellas.
Y vivían en un árbol plateado, que era el gran portal hacia el Mundo de los Muertos, el Infierno. El árbol estaba muy oculto y sólo se abría de noche. Al abrirse mostraba una pared del color de las calurosas y ardientes llamas del Infierno.
Los murciélagos eran los guardianes de esta dimensión. Nunca
cerraban los ojos siempre estaban atentos a cualquier movimiento.
Una noche nublada donde no se veía ni una luz y tampoco se escuchaba nada, solo el sonido del viento helado. Una joven perdida en el espeso bosque encontró el árbol abriéndose lentamente. Una vez abierto, la joven se escondió detrás de una roca para que los murciélagos no la vieran. Era lo más terrible que había visto, las paredes brillaban más que nunca. La joven quería escapar pero
no pudo.
Una fuerza la obligo a tirar una piedra para distraer a los murciélagos. Y en esos segundos corrió hacia el portal.
Una vez a dentro del Infierno, sintió un calor insoportable, que aumentaba cada vez más. Hasta que no aguanto y murió.
El portal se empezó a cerrar y tirar vapor por todas las direcciones.
Los murciélagos vieron el humo y volaron rápidamente hacia el portal, todos alcanzaron a entrar. Ya dentro, se dieron cuenta que el Infierno sé había apagado. Los murciélagos volaron lo más rápido que podían para salir de esta oscuridad fría, pero ni uno lo logró, el portal se había cerrado y no-se volvería abrir en muchos años más.
Pasaron 1.000 años desde la desaparición de estos ratones voladores. Un día sé volvió abrir.
Los murciélagos aprovecharon de salir antes que se volviera a cerrar por otros 1.000 años.
Salieron y una luz radiante les llego a los ojos secándoles la vista para siempre. Habían salido de día.
Volaron desesperados por todas partes, cada uno en diferentes direcciones, repartiéndose por todo el mundo.
El portal nuca mas sé volvió abrir y nadie nunca lo encontró.