Anoche soñé
que estabas conmigo,
desperte y lloré,
que triste castigo.
Mi almohada abracé,
pues tú haz partido,
nunca imaginé,
haberte perdido.
Mi sueño era bello
me daba un consuelo,
acariciaba tu cabelo,
tu precioso pelo.
Sonreías muy tierna,
me hablabas al oído,
cruzabas tus piernas,
jugabas conmigo.
Me dabas mil besos,
y luego huías,
y yo de travieso,
siempre te seguía.
Fue pasando el tiempo,
y fuimos un alma,
fue testigo el viento,
al llegar la calma.
Fue un momento sublime,
un canto al amor,
supiste subirme,
cerca del creador.
Más solo fue un sueño
y hoy lo compriebo,
pero si pongo empeño,
volverás de nuevo.
La casa te espera,
sin tí está fría,
regresa morena,
vuelve vida mía.
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