Qué increíble, que las cosas y la vida cambien tanto. Ayer era una niña, hoy soy algo que nunca pensé en ser, y tal vez no está mal, tal vez la vida va cambiando tan rápidamente, pero hay una parte dentro de mí que extraña no ser como antes, esa niña que tenía sueños y luchaba por ello, que tenía pasiones y por alguna razón que desconocía pero que hoy reconoce a kilómetros de distancia, solo por alguna razón escapaba, esa niña que soñaba con el príncipe azul y se enamoraba de cada hombre que le tomaba la mano y le hacía sentir protegida, esa niña que quisiera volver a ser y a sentir. No está mal crecer, es natural, normal y necesario, el problema está, en si lo estoy haciendo bien. Quisiera dormir, despertar en tu cama dos años antes y no dejarte ir, porque sé, estoy segura que si no te hubieras ido, nada hubiera cambiado y seguiría soñando, y hoy no sería lo que nunca quise ser. |