El gatito poeta estaba perdidamente enamorado de la gatita artista, pero no se animaba a decirle las cosas, no sabia cuando había empezado esto, ni por que lo sentía, lo único que sabia era que la quería. Lo intento ocultar, tratar de olvidar pero no consiguió nada de esto, finalmente sus poemas ya eran dirigidos a alguien no solo a la luna, o al cielo, o a todos los enamorados que habían visto, por fin se encontraba en esa situación, pero realmente no sabia como actuar.
Así que le contó todo a su amigo el pandita musical, ya que el pandita musical ya se había encontrado en esta situación, pero los dos no tenían idea que hacer así que hablaron de sus problemas, el gatito poeta lo pensó mejor y fue a decirle a su amiga la conejita psicodélica que además de ser amiga del gatito era muy amiga de la gatita artista, al principio la conejita psicodélica se rió de el, le dijo que jamás le había pasado por la cabeza, que como quería que le creyera , si el hacia poemas para todas como sabia que su amiga no era una mas.
El gatito trato de hacerle entender que lo que sentía era verdad y al fin convenció a la conejita de que lo ayudara, pero para pesar del gatito, la gatita artista opinaba lo mismo que la conejita, ahora el único detalle era hacer cambiar de opinión a la gatita. Pero el gatito tenia mucho miedo de decirle las cosas, no sabia que hacer como reaccionaria, antes era muy fácil escribir poemas pero por primera vez no sabia como expresar lo que sentía, ya que era la primera vez que sentía.
Los animalitos del bosque de las tres hojas hicieron una fiesta por la llegada del invierno y hubo muchos invitados, fue el pandita musical, así como la conejita psicodélica, también llego mapachito fumador, que venia con el osito corredor, pero de entre todos destacaba la gatita artista, el gatito sintió mucho miedo y no quiso decirle nada, pero después de probar el ponche feliz ya no sentía temor, bueno un poquito, pero fue así, el gatito se la paso con la gatita toda la noche y cuando menos se lo esperaba le dijo lo que sentía, , la gatita no supo como reaccionar, fue un chok para ella, conocía al gatito desde hace mucho tiempo y a pesar de que le gustaba, lo veía como un buen amigo.
Además ya sabia que era poeta, y le escribía versos a todas, y que nunca se había tomado algo en serio en su corta vida, ¿por qué creerle ahora?, así que le dijo lo que pensaba, el gatito se sintió triste y no supo como reaccionar, juro que lo que había dicho era en serio, pero la gatita no cambio de opinión, el gatito se quedo desolado.
Al recordar lo que la gatita le había dicho, “te quiero solo como amigos”, ya había escuchado esas palabras pero el gatito nunca se había imaginado lo mortales que pueden ser en una situación así, se puso a pensar en muchas cosas, en por que no había cambiado, por que no se enfoco en escribirle poemas solo a ella, en ves de repartirlos a conejitas, ositas, mapachitas y otra infinidad de animalitas. El gatito no sabia que hacer y hasta la fecha no lo sabe.
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