Qué bonitos ojos claros tienes,
qué terrible alma habita en ellos,
preferible ser fea hasta indiferente
que tener que ser bello y deficiente.

Logras volver la genética en milagro
y un milagro necesitas para ser feliz,
mas no te has dado cuenta del letargo
que tuvo tu vida cuando tu madre decidió parir,
tremendo hombre hermoso de corazón insano
con un bote de basura en vez de corazón,
con un cubo de aire entre las sienes
y un orujo que no despierta ni con el sol...

Hoy me dan asco tus manos
tocando mi cuerpo virginal,
hoy soy basura de besos
que me entregaste, pérfido y vanal.

Siento asco al mirarme al espejo
y encontrar tu sucia huella fantasmal
me vomito ante la vida de pendejo
que dejó tu vida en mi andar.

Sucio mendigo de amor,
te saliste con la tuya,
infecto garabato de terror
que la vida te hará pagar.

Sigues siendo un hijo de puta,
malparido, ogete y sin cordura,
sigues siendo el mismo ginete
que lleva espada en la armadura
para clavarla en la espalda clemente
de quien como tu madre da vida.

Nauseabundo, hijo de cortesana,
entre besos asquerosos embriagas
corazones sinceros que te dan amor
y que sueñan con conquistar tu flor
de ser infernal. Producto vomitivo
de sentimientos sanos que sollozan
tras las puertas de tu descaro y desamor.

Hoy tienes una pequeña hija
que la vida te hará pagar,
porque toda vida se cobra
y esta no ha de fallar
con quien en verdad se adora.

---------------------------------------
P.D. Se dice que he ofendido a las cortesanas con este poema, discúlpe ud señora cortesana por tan mal hijo parido, pero es que solo una escoria humana pudo haber sido un hijo no querido... y que conste que me refiero a el y no a ud., pues en oficio mas grato, no me atrevo ni siquiera a ofender, sino mas que a la mocha madre de quien fuera, el rey de mi perdición...