La hoja en blanco se ceba con las promesas que imagino y no soy digno de expresar,
Las calles vacías de tu esencia, pierden el sentido en cada esquina y cada esquina es el olvido de lo que ocurrió antes.
Antes y después, momento que existió y desapareció en el mismo segundo, linealidad que surge y se inmiscuye en la vida cruzándose inexorablemente, creando nuevas vías de escape que conducen a nuevas esquinas del olvido,
Y entre todo eso, la soledad, el individuo, los pensamientos.
No importa la gente que te rodeé, las voces que escuches y los abrazos que recibas.,
La voz de tu mente siempre esta contigo,
La que te dice y opina dentro de ti mismo,
La que se olvida,
La que te hace diferente.
En definitiva, tu soledad, es tu vida, tu guía.
Cruces, rías, sufras o llores, el camino sigue con sus desvíos y dentro de cada individuo existe la soledad.
Sentirla, intentar expresarla y que salga de uno durante un segundo, una breve pausa de la voz interior se pierde al dejarla incrustada en el papel blanco, en la calle que ya no sabe nada de ti y todo pierde el sentido.