Los viejos de la esquina
Los viejos de la esquina refunfuñan,
Se les escapo otro día de sus vidas, ya corroídas por amaneceres,
Son tan poco en este mundo y un mundo para tan pocos.
Inmersos en una realidad que los castigo por ser humanos,
Tal vez uno que otro error en la vida,
Ser pobre no es un problema que los castigue,
Son marginales por consecuencia.
Lejos de aquellos que buscan una salida fácil,
Se limitan a una mano bondadosa que descubra personas en ellos,
Quiero entender que es todo esto, porque pasa y sigue pasando,
Porque me doy cuenta cuando ya nada puedo hacer.
Los viejos de la esquina se conforman con un pan viejo y vino barato,
Y añoran un verano en el crudo invierno.
Las veredas no los acogen como ellos esperan.
Un diario a modo de cobija y la ilusión de que todo cambiará
Son lo que se llevan a una cama imaginaria,
Quieren prender una luz que hace tanto se apagó.
No conozco su pasado, si apenas sus caras,
La bondad parece prevalecer entre sus ropajes rotos,
Porque somos tan malditos, nunca les tendimos esa mano.
Un día decidido salí a caminar por esas calles,
Con monedas en mi bolsillo, dispuesto a alegrarles un instante,
Los viejos de la esquina se habían ido.
Busque una respuesta y un alma ambulante despejo mis dudas,
Uno de ellos encontró el único tesoro que la sociedad no le pudo quitar,
Su vida valía mas allá arriba que aquí en el medio.
Alguien me contó que los viejos lloraron,
Y como indigentes en una calle y en unos minutos lo velaron,
Justo antes de que ambulancias y policías se lo llevasen,
Que irónica es la vida, pensé, le prestan mas atención muertos que en vida.
Volví a mi casa, estaba todo vacío,
Sentí la necesidad de velar al viejo anónimo.
Los viejos de la esquina no han vuelto,
Tal vez teman al fantasma de su amigo,
Tal vez el dolor sea tanto que quieran acompañarlo,
Yo creo que el frío va a pasar y ese verano soñado volverá,
Espero que los viejos de la esquina lo sepan,
Presiento que mi inconsciente los extraña,
Él sabe que tal vez ellos eran los guardianes de la cuadra,
Tal vez me acueste y los sueñe libres...
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