Se notaban ya, tus ojos cansados
que miraban al lado, para no delatar...
fatiga del tiempo que ibas llevando
perdiendo recuerdos que no podías cargar...

Más lento era tu paso, de corta distancia
y rápida la fatiga, que no te dejaba seguir...
no escuchabas tanto y hablabas más pausado
pero seguias demostrando que era hermoso vivir...

Yo no conocí a mi abuelo, pero te había adoptado,
y se que tu me querías, como un nieto más...
hoy te recuerdo más lindo, más lindo que nunca,
contando las historias que nunca olvidás...

No se si pude decirte, todo lo que sentía
y con tu partida, me quede sin hablar...
pero siento a diario que vienes a cuidarme,
entonces te escribo, por si llegas a pasar...

Como se siente tu falta en la familia,
tanto a cambiado y tu lugar esta allí...
Pero el tiempo sigue y no espera por nadie,
no es justo, ni piadoso, es simplemente así...

Tu dinamica con la abuela, tantos años,
nunca sola, la hubiera podido imaginar...
Hoy estarías orgulloso de todos tus nietos,
siguiendo los sueños con tu caminar...

Permíteme imaginarme ser un poco de ti,
tener tus palabras, tu sabiduria de vivir...
compartirte en familia, con mis futuros hijos,
pues siempre donde vaya, tu vas a venir...