La noche que Jesús Regreso
H. R. Ravencrow




En una fría noche de diciembre las 8.00 PM, acababa de salir de mi jornada de trabajo, y caminaba hacia la parada del transporte urbano, al mismo tiempo me despedía de algunos compañeros, quienes usaban un transporte marcado con diferente ruta. Sonreían y hacían bromas, se veían felices por haber terminado su rutina laboral, parecía un día como cualquier otro, uno de esos tan rutinarios, que dan la impresión que serán igual todos hasta el fin de tus días. Finalmente, después de caminar una cuadra, llegue a la parada, en tal lugar se encontraban aproximadamente 15 personas esperando el transporte, algunos laboraban el la misma empresa que yo, pero la mayoría eran empleados de el centro comercial que se ubica en frente de mi lugar de trabajo, y ahí me quede esperando durante mas de 30 minutos, me encontraba muy nervioso, tan nervioso y desesperado que comencé a temblar, mi esposa seguramente se encontraría pensando que en esos momentos estaría recibiendo favores sexuales de alguna fémina de dudosa reputación, me imaginaba los gritos e insultos de los cuales haría victima a su servidor, en el momento en que mas desesperado me encontraba, el enorme vehículo marcado con la ruta numero 46, mostró su transparente rostro, mis compañeros de espera mostraron diferentes expresiones, algunos de alegría, otros de impotencia, y una gran variedad de demostraciones de sentimientos, la esperanza nos abandono a todos cuando el chofer, con una sonrisa burlona, no detuvo la unidad, pasando de largo sin darnos la oportunidad de ingresar al camión. Cuantos improperios mis compañeros y yo prodigamos a aquel operador de transporte urbano. Mi nerviosismo aumento de sobremanera al recordar a mi esposa, me preguntaba que tanto podría enojarse, y que terrible castigo emocional me otorgaría. Oh señor, por favor sosiega la cólera de mi compañera, decía y pensaba. Después de 18 minutos de esperar el siguiente autobús, un sonido terrible como de trompeta, casi destruye mis oídos, al ver a la gente que me rodeaba, me percate que casi todos se encontraban en el suelo, debido a el dolor provocado por el sonido, preguntaba a mi mismo, que seria aquel ruido que envolvía todo lo que mi vista abarcaba y probablemente mas allá, jamás en toda mi experiencia de vida había presenciado un portento de tal magnitud, rodeándonos, habían algunos árboles, de los cuales cayeron algunos murciélagos, fulminados por el sonido tan poderoso, tal vez, alcanzo una frecuencia que destrozo algunas células de vital importancia, aunque la verdad, en ese momento, no me importaron mucho los destinos de aquellos miembros de la orden chiroptera, me concernía mucho mas mi integridad física, y sobretodo, me preocupaba que mi esposa jamás creería todo aquello, y desataría su furia sobre su servidor. En esas estaba, cuando levante la vista hacia una extraña luz que venia del cielo, de una extraña nube, se movía a una velocidad que ningún cúmulus congestus habría soñado alcanzar, aunque claro, las nubes no sueñan. Aquel sui géneris nimbo además de desplazarse horizontalmente, disminuía su altitud de forma por demás rápida. Mi hipotálamo aumento el flujo de péptidos a mi corriente sanguínea al darme cuenta que era hacia donde estaba yo, que se dirigía la nube. Mi razonamiento no era capaz de discernir todo aquello, por momentos pensé estar perdiendo la razón, mas no era así, por alguna situación estaba seguro de que no era así. La nube se acercaba más y más, al momento de estar aproximadamente a 10 metros de altura, las personas alrededor de mí, huyeron despavoridas, no entiendo mi estupidez tan grande al no correr yo también, afortunadamente viví para contarlo, pero si esa cosa hubiera destruido el lugar en que me encontraba no hubiera quedado nada de mí. En el trayecto desde los 10 metros hasta donde yo me encontraba, transcurrió solamente un segundo, mas en mi mente, hubiera jurado fueron horas, pensaba en mi pobre esposa, ya que después de la angustia que le provocaban los celos, experimentaría el dolor de saber a su esposo muerto por aquel desconocido fenómeno. Por un momento olvide la situación en la cual me encontraba, pensando en la sonrisa de mi mujer, hasta ese día, no estaba conciente de lo que extrañaba su sonrisa, la cual había huido de su hermoso rostro desde mucho tiempo atrás. De pronto mi lucidez volvió, al sentir la nube justo encima de mi, a escasos centímetros de mi cabeza, estaba detenida, estática, levante la cabeza y pude observarla detenidamente, aquella no era una nube común y corriente, era casi sólida, como si fuera algodón flotando en el aire, moviéndose a capricho del viento sin salirse de cierto parámetro, la mire y mire tratando de deducir que clase de fenómeno era eso, dirigí la mirada alrededor de mi, vi. que la nube abarcaba hasta donde la visión cubría, solamente el piso era visible. Rápidamente, una luz que parecía como argon ionizado fue aumentando de intensidad, justo encima de mi, cuando llego a un punto casi enceguecedor, una mano salio de entre la nube, me tomo por la camisa y me jalo hacia arriba, atravesé la nube a una velocidad que me provoco nauseas, sin embargo tarde 1 minuto en atravesarla completamente, al llegar al otro extremo, la nube que segundos antes atravesaba como al aire, se volvió tan dura que probablemente obtendría una buena puntuación en la escala de Mohs, me levante tambaleando, mire a mi alrededor, que visión tan alucinante, sobre la nube había un enorme ejercito, era tal la cantidad, que no podía contarlos, no había visto tantas personas juntas en mi vida, pero lo mas sorprendente de las tropas, era su aspecto, portaban una armadura dorada, extremadamente brillante, una espada en la espalda, y otra mas pequeña en la cintura, esos eran los que estaban enfrente de mi, en diferentes extremos había otras filas con diferentes atuendos, una parte de aquellos guerreros, estaban alineados al lado de grandes y hermosos caballos, los de las filas de la derecha, estaban armados con arcos y flechas, otros tenían unas larguisimas lanzas, todo aquello era tan hermoso e impresionante, sin embargo yo solamente podía preocuparme por mi esposa, a quien ya me imaginaba escuchando el relato de mi experiencia,--Mi amor, ¿Que crees?, fui abducido por un extraño fenómeno desconocido.-- Jamás me lo creería, acto seguido, descargaría las demostraciones mas iracundas sobre la integridad física de su servidor. Uno de los que parecían ser los oficiales, dio una orden a 2 soldados, estos, ipso facto se dirigieron a mí, eso fue realmente aterrador, tenían un aspecto de asesinos despiadados. Al llegar a mi, pensé que iban a matarme, pero por el contrario, me hicieron una reverencia, y me señalaron una dirección dándome a entender que los siguiera, me condujeron por un corredor, entre las filas, camine y camine hasta divisar a un oficial que parecía ser el general supremo, el se encontraba esperándome, mirando hacia mi con un gesto de impaciencia, estaba sobre una especie de trono sobre una tarima escalonada, al llegar a ella, los 2 soldados, saludaron al general con una reverencia, y se retiraron a su lugar. Por un momento me quede detenido enfrente de aquel hombre, el levanto la mano, en señal de que me acercara, dudando, camine hacia el, cada paso que daba retumbaba en mi cabeza, por un momento deje de pensar en mi esposa, aquel ser era de una presencia muy poderosa y autoritaria, imponente, como jamás vi a otro hombre, si acaso a una mujer, mi esposa. Al estar lo suficientemente cerca para hablar a volumen regular, el hombre dijo, Ven y veras, acto seguido, me pregunto si sabia su identidad, me avergoncé tanto de no conocer a aquella persona tan importante, sin embargo fui sincero y le respondí que no, el me explico su nombre, o mas bien sus nombres, El Primero Y Ultimo, La Estrella De La Mañana, El Rey De Reyes, El Príncipe De Los Pastores, El Obispo De Las Almas, El Sumo Sacerdote, El Señor De Todos, El Fiel Y verdadero, El Testigo fiel, Amen, El León de La Tribu De Juda, El Maestro, El Señor De La Paz, El Camino, Puerta, Rabí, EL Buen Pastor, El Pastor de las Ovejas, El Cordero de Dios, EL Hijo del Hombre, El Todopoderoso, Emmanuel, El Ungido, El Mesías, La Vid, Pan De Vida, La Rosa de Saron, El Lirio de los Valles, La Luz del Mundo, La roca, La Piedra Viva, La Cabeza del Angulo, El Deseado de Todas Las Naciones, El Regalo de Dios, El Mediador, El Intercesor, EL Abogado, El Fiador, La Verdad, La Vida, La Resurrección, El Galileo, El Carpintero, El Nazareno, El Señor de la Gloria, EL Señalado entre 10,000, El Varón de Dolores. Hablaba y hablaba, decía y decía, mientras el seguía diciendo su larga serie de nombres, yo pensaba en mi esposa, a ella jamás le importaría nada de lo que me estaba pasando, que importancia tendría para ella los motes de aquel poderoso ser, que me arrebato de mi cotidianeidad. En realidad no creo que las mas mínima. En eso pensaba, cuando el general detuvo sus palabras, me quede mirándolo sin decir una sola palabra, por un momento, el tampoco dijo nada, simplemente me miraba, como si esperara una reacción de mi parte, durante un pequeño espacio temporal, permanecimos así, hasta que probablemente desesperado grito-- Soy Jesús, El Salvador--. Después de concentrarme en el asunto, dejando a un lado a mi esposa, finalmente entendí que ese hombre era Jesús de Nazareth. No encontraba las palabras, así que decidí decir una pequeña broma, le dije-- OH Señor, no te reconocí sin la cruz--, después de mi comentario, el Señor me miro con cara de; No me hizo la menor gracia, sin embargo, después de unos segundos, continuo hablando, y me dijo--Tu eres el elegido por mi, para ser el primero de los salvados--, la verdad no tenia idea de lo que me hablaba, la incertidumbre me molesto mucho, así que le pregunte-- ¿Señor, me puedes decir a donde vamos?-- El Señor, me respondió que íbamos a un lugar donde no existía el sufrimiento, ni el hambre, donde todo es diversión y no se conoce el aburrimiento, Le pregunte en tono de broma si íbamos a Disneylandia, lo cual tampoco le hizo la menor gracia. Me condujo a la orilla de la nube, desde ahí se podía ver la ciudad, mi hermosa ciudad, la cual recorríamos a una velocidad como de automóvil, las luces de las casas y edificios del centro hacían una especie de cuadricula luminosa, fue una visión magnifica, alucinante, sin embargo, yo no dejaba de pensar en mi esposa, si me tenia que ir con el Señor, pues tendría que recoger a mi esposa, no podría irme sin ella, a donde quiera que fuera, y mi familia, ¿que seria de mi padre, mi madre, mis hermanos y sobrinos, acaso volvería a verlos?. temblando de miedo le pregunte que era lo que pasaba, el Señor me respondió de esta forma-- Hoy es el gran día del Señor, el día en que me llevare a mis hijos para que vivan en mi reino que no es de este mundo, ay de los que se queden, ya que sufrirán dolores nunca imaginados por ningún mortal-- En ese momento, me decidí a preguntarle si íbamos a pasar por mi esposa, tenia tanto miedo, pero no dude mas y lo hice, el Señor, volteo con una mirada fulminante, y dijo-- Hijo mío, tu mujer no viene con nosotros, ella se queda aquí a sufrir, pero no te preocupes, en el lugar a donde vamos, no te acordaras de ella, además todos serán como una gran familia, eternamente feliz-- No respondí absolutamente nada, pero mi mente seguía con mi mujer, Mi mente no concebía que yo viviera en el paraíso por toda la eternidad y ella se quedara en este mundo tan terrible, no era justo, yo prometí estar con ella, cuidarla, respetarla, mi obligación era estar con ella, en las buenas y malas, pasara lo que pasara. Pensaba en eso, cuando el Señor pregunto por que no salía la gente para ser raptada hacia el reino, un poco molesto, llamo a el ángel de la trompeta, y le ordeno tocar mas fuerte, el guerrero hizo lo ordenado, pero ante la mirada atónita del Señor, seguía sin salir nadie, Como era aquello posible, ¿Quien rechazaría la oferta del Señor?, ¿Por que estaba pasando eso?. Por unos segundos, el Señor se quedo pensando, mientras yo lo contemplaba totalmente atónito, ya que su apariencia no tenia nada que ver con las pinturas renacentistas ni con los actores que lo habían personificado en el cine, no era rubio, ni tenia los ojos azules, ni hablaba como Enrique Rambal, su voz era fuerte y autoritaria, su mirada era dura, como un soldado, como un general a punto de la batalla, su piel era mas oscura que las representaciones pictóricas, ni el ni sus soldados usaban el cabello largo, de hecho todos usaban corte estilo militar, no tenia cicatrices en las palmas de las manos, tampoco tenia barba, que equivocados estábamos, pero lo que mas me llamo la atención era su sonrisa, Jesús no ríe, solamente esta serio, en eso pensaba, cuando el Señor volteo y me dijo-- Puedo revivir muertos, ¿Crees que no puedo curar unas pequeñas heridas?, y para tu información no fue en las palmas, fue en las muñecas, además nací en el medio oriente, querías que pareciera europeo, el corte militar es para que el enemigo no pueda tomarte de los cabellos, y lo mismo la barba, lo de la forma de hablar, tengo el amor de Dios conmigo, además el conocimiento infinito, ¿Quien crees que es mas feliz que yo?, ¿Acaso tu crees que alguien tan feliz va a hablar como Enrique Rambal?, Jajajjajjaj.-- No podía creer lo estupido que me sentía, aquel hombre o dios tenia tanta razón, por que no ha de reír el hijo del hombre, por que iba a verse como europeo si era del medio oriente, que idiota fui. Después de pensar un poco, el Señor me propuso ir por algunos de los elegidos hasta la puerta de su hogar, según el, eso haría muy felices a sus hijos. La verdad a mi no me parecía buena idea, pero quien era yo para contradecir a un dios. El Señor dio la orden de bajar la nube, cuando esta estuvo estacionada, me tomo de la mano, y repetí mi espantoso viaje a través de la nube, créame estimado lector, podría hacer ese viaje mil veces sin acostumbrarme, al llegar al suelo, pude ver la calle José Benítez en la colonia obispado, donde existen grandes y hermosas casas, todas tenían miles de luces, y adornos, era realmente hermoso estimado lector, caminamos hasta un domicilio, tenia una fotografía de el Papa Juan Pablo II en la cochera, el Señor toco la puerta y espero pacientemente, unos segundos después, apareció a la puerta una ancianita de amable aspecto, saludo con una hermosa sonrisa, y pregunto--Hola jovencitos, ¿Que se les ofrece?,--El Galileo respondió;--Margarita, soy el Rey de reyes, Jesús de Nazareth, estoy aquí para llevarte a mi reino, ha llegado el día grande del Señor, no necesitas llevar nada, a donde vamos lo tendrás todo y mucho mas, vamonos hija mía. Doña Margarita permaneció mirándonos silenciosamente, después de unos momentos, La mujer se dispuso a hablar, --Miren señores, en este hogar pertenecemos a la verdadera iglesia de La Virgen de Guadalupe, no nos interesan sus sectas, además, cuando la hora llegue, me iré con San Judas Tadeo. --El Señor la miro asombrado y le pregunto quien era ese tal San Judas Tadeo, La señora le respondió--Muchachito insolente, San Judas Tadeo es el mas santo de los santos, hace muchos milagros a sus devotos que le rezan con fe. En Alemania, Italia, América y muchos otros lugares, hay muchos devotos a los que les hace milagros admirables, principalmente consiguiendo trabajo, casa y otras cosas. --El Señor un poco sorprendido pregunto a Doña Margarita de donde había sacado lo de rezarle y pedirle cosas a el tal San Judas, a lo que la ancianita le respondió-- Pues fíjese jovencito que Santa Brígida dijo que Nuestro Señor en persona le recomendó que pidiera en nombre de San Judas Tadeo, además era pariente de nuestro señor Jesucristo por su parentesco con San Joaquín y Santa Ana, padres de la Santísima Virgen, era sobrino nieto de estos dos santos, es a la vez sobrino de María y José, entonces es primo de nuestro Señor Jesucristo, era uno de los apóstoles, --El Señor la interrumpió de inmediato, algo enojado diciendo-- Margarita, ya se a quien te refieres, la persona de la que tu hablas es mi hermano, no mi primo,--Doña Margarita entonces se enfureció en contra del Señor, lo insulto y le dijo--Como te atreves a hacerte pasar por Cristo además insultar a la siempre santísima virgen, ella jamás tuvo otros hijos además de Cristo.--A lo que El Señor replico, -- Señora, no se quien es la santísima virgen, pero yo tuve hermanos, Santiago, José, Simón y Judas, y mis hermanitas; Salome y Myriam, de hecho usted lo puede comprobar en Mateo 13,54.-- Doña Margarita entonces le grito al Señor-- El Padrecito me dijo que La palabra "hermanos" en hebreo comúnmente significa un pariente próximo. El padre de San Judas era Cleofás. El nombre de su madre era María, que era pariente próxima de la Virgen Santísima. -- El Señor entonces prosiguió, --Margarita, yo conozco a mis hermanos, además lamento decirte esto, pero ninguno de ellos te escucha, ya que llevan muchos años muertos, Deja que los muertos entierren a sus muertos pero tú, ven y sígueme. -- Doña Margarita entro enfurecida, cerro la puerta fuertemente, y nos dejo afuera. Mire al Galileo quien permanecía silencioso, pero después de unos segundos, volteo a verme con una sonrisa optimista, no dejaba de maravillarme su sonrisa, ya que desde niño me enseñaron que Jesús no sonreía ni bromeaba ni se divertía, recuerdo una ocasión cuando era niño que durante mi preparación para realizar mi primera comunión, pregunte a mi catequista, si Jesús tomaba alcohol en las fiestas, me castigo por 2 días, además de recetarme una humillación espantosa delante de mis compañeros. Recordaba y recordaba cuando de pronto, El Señor me dijo-- No te preocupes, pronto se arrepentirá cuando vea la ira de mi padre, vamos por otro de mis borregos, nuevamente hicimos el espantoso recorrido por la nube, insisto, podría hacerlo un millón de veces sin acostumbrarme. Recorrimos una parte de mi hermosa y amada ciudad de Monterrey, con dirección al norte, desde arriba pude reconocer el barrio llamado Colonia Moderna, ahí fue donde bajamos por segunda vez, nos dirigimos a una vivienda de construcción bastante amplia, ubicada en la calle Peral, tenia una enorme ventana, donde se apreciaba un enorme y hermoso árbol de navidad, en el interior se divisaban diversas siluetas humanas, parecía como si tuvieran una fiesta, llamamos a la puerta, apareció un hombre de aproximadamente 50 años y pregunto que se nos ofrecía, El Señor le respondió que estábamos ahí para recoger a el joven Leonardo, le explico quienes éramos, y el hombre dijo—¿Quien se cree que es usted? , que atrevimiento tan escandaloso, malditos herejes, blasfemos, váyanse de esta casa, que esta protegida por La Virgencita de Guadalupe, --El Señor dijo-- Discúlpame hijo mío, no se quien es La Virgencita de Guadalupe, pero por favor...-- El hombre de la puerta enfurecido le dijo al Señor -- Cállese usted, en esta casa se respeta a La Santísima Virgen María, háganme el favor de no molestarnos en este momento, ya que tenemos invitados, además de ninguna manera permitiría que mi hijo Leonardo fuera con ustedes,--Entonces El Señor pregunto --¿Quien es La Santísima Virgen María o Virgen de Guadalupe, acaso te refieres a mi madre?, hijo, mi madre murió hace muchísimos años, no puede protegerte, ni a ti ni a tu casa, por que no entienden que los muertos no pueden ayudarlos ni escucharlos, simplemente están muertos, pues los vivos saben que han de morir y pueden disponerse, pero los muertos no saben ya nada, ni están en estado de merecer, y su memoria ha quedado sepultada en el olvido, esas son palabras de las sagradas escrituras, mas específicamente de Eclesiastés IX,5. --El hombre de la puerta dijo-- Miren ustedes blasfemos, no conozco a ese tal Eclestes ni a que se dedica pero mi hijo no se va con ustedes,-- En esas estaban cuando de el interior de la casa se escucho una voz de niño que decía--Tío, dice el padre Juan José que invites a estas personas a el interior para poder defender a la verdadera iglesia fundada por Cristo--. El hombre de la puerta nos dijo--Muy a mi pesar los invito a mi casa, para que el padre, quien es un hombre santo los calle, el si ha leído la Biblia,--Nos dirigimos al interior, donde llegamos a una gran mesa, con mucha gente, aproximadamente 16 personas, en un extremo estaba un sacerdote católico, en el otro extremo estaban dos sillas vacías, el sacerdote hacia una seña con la mano ofreciéndonos las sillas de el otro extremo, de inmediato nos sentamos en donde nos indicaron, El Señor se veía tan seguro de su infinita sabiduría, tan confiado, que acepto hablar con el Padre, al sentarnos, El Señor volteo a ver las paredes, se veía indignado, al ver tantas imágenes, de tantos santos y de La Virgen de Guadalupe, sin embargo , cuando nos ofrecieron algo de beber, El Señor pidió un vaso de vino, en esos momentos recordé a mi esposa, en esa casa podrían prestarme el teléfono y poder comunicarme con ella, avisarle que me iba al paraíso con Jesucristo para que no se preocupara, pero después pensé en lo que me respondería al escuchar mi excusa. Pensaba en eso cuando el Padrecito dijo--. Miren ustedes ovejas descarriadas, no se por que hago esto, pero les diré quien es La madre de Dios, pues miren, Ella es la "segunda Eva", la "Reina del cielo", la "Elegida de la Trinidad", la "Esposa del Espíritu Santo" y la mujer "conquistadora de la serpiente"" Ella es " la criatura más excelsa salida de las manos de Dios." Es la que mayor intimidad tiene con Dios, al ser Hija, Madre y Esposa, con su pie virginal aplastará la cabeza de la serpiente, Estamos viviendo los tiempos de María Santísima, ella es quien prepara ahora la manifestación del triunfo de su propio Hijo Jesucristo en la que Su Reino alcanzará su plenitud en la tierra, En el tercer día después que sobrevino la muerte, su cuerpo virginal fue unido una vez más a su alma. Tal cual su Hijo, no se le permitió ver corrupción; gloriosamente, Ella fue llevada al Cielo, y triunfalmente coronada como Reina--, El Señor lo interrumpió, y le pregunto, --Espérame Juan José, Dime de donde sacaste eso, en que parte de las escrituras dice eso, como te atreves a otorgar títulos de esa forma--, La persona que quiera hacer eso, debe hacerlo con las escrituras en mano. Si mi Padre predestinó a María a ser la "segunda Eva", la "Reina del cielo", la "Elegida de la Trinidad", la "Esposa del Espíritu Santo" y la mujer "conquistadora de la serpiente", es de suponerse que haya revelaciones contundentes al respecto en el libro más importante del Hombre, en las Sagradas Escrituras, las evidencias de las tradiciones religiosas y culturales, son tradiciones cambiantes y subjetivas, no son suficientes. Es requisito el testimonio preciso de las Sagradas Escrituras.-- El Padre Juan José le dijo,-- Si existe testimonio en la Biblia, podemos remitirnos a la infinita sabiduría de el Rey Salomón en El Cantar de los Cantares, ahí lo dice claramente el capítulo ocho y el versículo cinco, donde dice: "¿Quién es ésta que sube del desierto, recostada sobre su amado?" Significa, que el "desierto" es la tierra, y que la que "sube" es María, se trata de su ascensión. También tenemos el Salmo 132:8, donde dice: "Levántate, OH Jehová, al lugar de tu reposo, Tú y el arca de tu poder". El "arca" es María, por consiguiente, ella fue levantada al lugar de reposo, es decir, que ascendiese al Cielo. Dios ensalza a María por encima de todo ser humano, incluso, los apóstoles y profetas, y por encima de los ángeles, colocándola sobre el trono con Jehová, Cristo y el Espíritu Santo, porque ella era la única, con la excepción de Jesús, cuya alma nunca fue manchada con el pecado original, ya que su concepción fue inmaculada al igual que la de su hijo.--A lo que repuso El Señor--Juan José, Ese cantar se refiere al amor entre esposos, y el Salmo en verdad se refiere a El Arca de la Alianza, además dime que cosa es eso del pecado original, y de donde sacaste todo esto ,nada de esto esta en las escrituras.-- El Padrecito le respondió a El Señor-- La causa del mal en el mundo es el pecado. El Diablo y los demonios fueron creados por Dios, pero ellos mismos se hicieron malos porque cometieron el gran pecado de rechazar a Dios. Inmediatamente fueron lanzados al infierno, condenados para siempre.
Por su pecado tienen odio a Dios y envidia a los hombres. Por eso tentaron a Adán y Eva, nuestros primeros padres, diciéndoles que si desobedecían a Dios, serían como dioses y conocerían el bien y el mal.
Adán y Eva se dejaron engañar por el demonio y desobedecieron a Dios. Este fue el primer pecado en la tierra: el pecado original, y por esto todos los descendientes de Adán y Eva, excepto la Santísima Virgen María, venimos al mundo con el pecado original en el alma, y con las consecuencias de aquel primer pecado, que se nos transmite por generación. Todos nacemos con un pecado, el cual es necesario lavar por medio del bautismo--Jesús replico, --Él Padre es el "Padre de los espíritus" El no crea almas impuras, El alma que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo." Y el Padrecito dijo,--Nuestro dogma no atribuye a los hijos de Adán ninguna responsabilidad propiamente dicha por el acto de su padre, ni dice que el pecado original es voluntario en el sentido estricto de la palabra. Es verdad que, considerado como una "deformidad moral", una "separación de Dios", "la muerte del alma", el pecado original es un pecado real que priva al alma de la gracia santificante. Es tan pecado como lo es el pecado habitual, que es el estado en el que queda colocado un adulto a causa de una falta grave y personal, la "mancha" que Santo Tomás—Dijo Juan Jose al tiempo que señalaba una imagen de dicho santo-- dice que es huna privación de la gracia" y es precisamente desde ese punto de vista que el bautismo, al poner fin a la privación de la gracia, "borra todo aquello que constituye un pecado real y propiamente dicho", ya que la concupiscencia que permanece "no es un pecado real y propiamente dicho", aunque su transmisión es igualmente voluntaria, considerado precisamente como voluntario, el pecado original, la sombra de un pecado propiamente dicho.--El Señor interrumpió bruscamente, --Juan José, dime de donde sacaste todo eso, como te atreves a otorgar títulos a diestra y siniestra, solo El Padre tiene ese derecho, por medio de sus Sagradas Escrituras, que autoridad tienes tu, insisto, como convierten en dioses a humanos, por que atribuyes a mi madre poderes que mi Padre no le dio, y que no están registradas en las escrituras, quien sea que quiera decir algo así, sea sacerdote, obispo, cardenal o el Papa, que lo haga con la Biblia abierta, pues si Mi Padre destino a mi madre a ser la "segunda Eva", la "Reina del cielo", la "Elegida de la Trinidad", la "Esposa del Espíritu Santo" y la mujer "conquistadora de la serpiente", es de suponerse que haya revelaciones contundentes al respecto en el libro más importante de la humanidad, en las Sagradas Escrituras. Las evidencias de sus tradiciones religiosas y culturales, por ser estas tradiciones cambiantes y subjetivas, no son suficientes. Es indispensable, testimonio claro y preciso de las Sagradas Escrituras, no valen los "testimonios", las " visiones", las "apariciones", “Santos que ni conocí y que están bien muertos dicen esto o aquello” etcétera, sino sólo la verdad escrita en la Biblia.
Las aseveraciones de hombres tienen poco o ningún impacto en la verdad ¿Preparar el ambiente para la segunda venida de su Hijo? ¿Tan poderosa es mi madre? ¿Hay alguna profecía al respecto en la Sagrada Biblia? ¿Dónde? Quiero leerlo. Me gustaría saber en qué parte de la Biblia se dice que María intercede entre Dios y los hombres, les pido un solo fundamento bíblico. Solamente la verdad divina expuesta en las Sagradas Escrituras, es verdad verificable porque está escrita. Mi madre se menciona por última vez en las escrituras en Hechos 1:14 donde se nos informa que ella perseveraba en oración con los ciento veinte discípulos, en espera del cumplimiento de la promesa referente a la manifestación del Espíritu Santo. ¿Cuándo y dónde murió mi madre? ¿Dónde fue sepultado su cuerpo? El relato inspirado no proporciona ningún detalle, lo cual da a entender que tal información no debe tener importancia alguna para el cristiano. De cierto, en el contexto espiritual del evangelio puro, tales pormenores no tienen ninguna importancia, pues el cristiano verdadero no venera los lugares de nacimiento, las tumbas o las reliquias de los personajes de la Biblia, o de la historia cristiana, sino que ensalza y glorifica solo al Hijo de Dios. Deja que los muertos entierren a sus muertos. Pues los vivos saben que han de morir y pueden disponerse, pero los muertos no saben ya nada, ni están en estado de merecer, y su memoria ha quedado sepultada en el olvido. Veneren y adoren solo al "único Dios verdadero, y a Jesucristo", que es el "solo mediador entre Dios y los hombres" Como dice en 1 Timoteo 2:5. -- El padre interrumpió diciendo.-- Dios, no es un Dios de muertos, sino de vivos. Pero tú dices que cuando uno se muere se acaba todo y no pasa nada hasta que Jesús vuelva. Eso es falso porque la misma Biblia nos dice claramente que Dios no es un Dios de muertos sino de vivos, en Mt 22,32 dice, Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob, Dios no es un Dios de muertos, sino de vivos. En Mc 9,1-4 dice. Se les aparecieron Elías y Moisés, los cuales conversaban con Jesús. Si al ladrón crucificado al lado de Cristo por un minuto de fe Jesucristo se lo llevó al paraíso para estar junto a él., con más razón se llevaría a su madre Maria, es totalmente lógico, quien de ustedes se llevaría a su casa a un ladrón en lugar de a su madre, es totalmente lógico, Y le decía: "Jesús, acuérdate de mí cuando vengas con tu Reino." Jesús le dijo: "Yo te aseguro: hoy estarás conmigo en el Paraíso. Así sucedió, queridos hermanos, uno de los crucificados tuvo fe de último momento y se arrepintió. Un minuto le bastó y en su gran misericordia Jesucristo le dijo que ese mismo día iba a estar con él en el Paraíso. Si a ese ladrón Jesús se lo llevó junto a él, con mayor razón se iba a llevar a su santa madre María, que era mujer llena de Fe, para que estuviera junto a él por toda la eternidad. Si el profeta Elías fue arrebatado hacia el cielo en 2 Rey 2,9-11 Con mayor razón será con María, madre de Jesucristo y fiel sierva de Dios. La ascensión, es de necesidad que Ella también la tuviera, igual que su hijo, pues muchos la tendrán cuando Jesucristo venga por segunda vez. Entre la asunción de María y los cristianos que serán arrebatados en los últimos tiempos no hay diferencia esencial sino solamente de tiempo. Sin duda que Jesucristo se llevaría a su madre para estar junto a el, esto fue definido como dogma por su Santidad Pío XII el 8 de Diciembre de 1950. En Jn 2,1-11 María intercede ante Dios por los hombres. En tal momento María ve que hay Una necesidad "Y, como faltaba vino, porque se había acabado el vino de la boda, le dice La Virgen, --Jesús: "No tienen vino."-- Esto es en Jn 2,3, Jesús le contesta-- "¿Qué tengo yo contigo, mujer? Todavía no ha llegado mi hora." Esta respuesta es porque María obviamente esta pidiéndole A Jesús que es Dios que haga algo por esa necesidad que esas personas tenían, Entonces eso es Interceder, y si lo hizo a favor de las personas que bebían en ese momento entonces intercedió Por esos hombres. Jn 2,6. Si intercedió estando en la tierra, con mayor razón lo hará ahora que esta en el cielo. Es totalmente lógico. Además, si Jesucristo escuchó y respondió a la oración del malhechor por un momento de fe cuando estaba en la cruz en Lc 23,42, con mayor razón escuchará a su madre, que hizo en perfección la voluntad de Dios y dijo: "he aquí la esclava del Señor. Hágase en mi según tu Palabra" Lo dice claramente en Lc 1,38, Si por un minuto de fe escuchó y respondió al ladrón, ¿Qué no hará Jesús por su madre que tuvo una vida de fe y obediencia? De hecho la Biblia dice que todos somos intercesores: "Oren unos por otros intercediendo por todos los santos" Esta escrito en Ef 6,18.—El Señor lo interrumpió--¿El dogma fue definido por quien?—Juan José respondió—Por el Papa Pío XII—Y El Señor pregunto—¿Solo por que lo dijo un hombre es cierto?—Juan José dijo—No es solo un hombre es el sumo pontífice, sucesor de Pedro, y como tal no se equivoca, el Papa es totalmente infalible.-- Cuando el padrecito estaba mas emocionado, luciéndose ante sus feligreses, sucedió algo totalmente inesperado, de la enorme nube comenzaron a verse rayos, y estruendos terribles se percibían, a pesar de ser noche, una luz salio de la nube, directamente hacia donde estaba El Señor, iluminándolo de forma casi enceguecedora, todas las imágenes de el patio aquel, fueron quemadas rápidamente, después de eso, se escucho una extraña, poderosa y aparentemente muy enojada voz del cielo diciendo--Te lo dije, no valen la pena, no son mas que simios que hablan, si por ellos fuera te crucificarían de nuevo y seguirían adorando sus monigotes, pinturas, y esas espantosas cruces. --El Señor le respondió a la voz diciendo-- Perdónalos Padre, por que no saben lo que hacen, solo son ignorantes y por lo tanto manipulables, no les gusta pensar, por eso se dejan llenar de estupideces, ninguno de ellos ha tocado una Biblia, por eso permiten que imbeciles como este les digan cualquier sarta de idioteces y se lo creen, si yo u otro les dice la verdad, no se toman la molestia de investigar o pensar por ellos mismos, lo que hacen es preguntar a gente como Juan José, este les dice los raciocinios tan “inteligentes y con tanta base en las escrituras” y como es mas fácil creer que pensar, se lo tragan todo pero no son malos, no puedo destruirlos a todos padre, tengo que rescatar a mis ovejas, no puedo quemar la casa para matar un ratón como lo hiciste tu con el diluvio, por favor padre mió—La voz dijo unas palabras en un idioma desconocido para mi, y El Galileo se tranquilizo un poco, después la luz desapareció, tan rápido como había llegado, todos los presentes tenían una expresión de total asombro e incredulidad, el señor entonces dijo--Que sus facultades intelectuales para entender las verdades divinas para la salvación de sus almas, no sean inferiores a las de los líderes religiosos, los oficiales y los teólogos. A Dios, gracias. Ustedes también las tienen; son el regalo de mi padre para todos sus hijos. Es deber de ustedes ponerlas a funcionar para que conozcan toda la verdad, pues el deseo de Dios es que "todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad" Como dice en 1 Timoteo 2:3. No permitan que otras personas, no importa su nivel de preparación académica o su grado de espiritualidad, piensen o razonen por ustedes, solo son hombres, solo yo tengo la autoridad de Dios, yo vine a cumplir las escrituras, ninguno de ellos viene a eso, solo yo. Que sus mentes no sean recipientes vacíos para que la llenen sacerdotes, obispos, profesores, predicadores o maestros con sus interpretaciones y teologías, sin que ustedes analicen el alimento espiritual que reciben. Ustedes también pueden pensar, razonar por ustedes mismos. Está en juego el destino eterno de sus almas. No deben creer, sin cuestionar, todo cuanto les digan. Tampoco deben abrazar creencias religiosas, cualesquiera que sean, para luego encerrar la mente y su espíritu tras puertas de acero, A toda persona que actúa de tal forma, se le dice prejuiciosa cerrada o fanática, pues no tiene la mente abierta. En 1 Tesalonicenses 5:21 dice claramente, "Examinadlo todo, retened lo bueno" También dice en Juan, 4:1,1 , "Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo" ¿Serán ustedes esclavos a merced de amos religiosos que disponen de sus personas y de sus almas como si fueran Dios, como todopoderosos, como infalibles?, Si mi padre mismo se arrepintió de haber creado al hombre, y a mi una simple y pequeña mujer cananea me quito lo racista con su humildad, si nosotros nos equivocamos, ¿En serio creen que un maldito sumo pontífice es infalible?, Todos ustedes tendrán una segunda oportunidad, todos menos tu Juan José, vendré otra vez por todos los demás, pero tu tendrás el peor de los castigos, ahora me voy y me llevo una única oveja, y por favor, no le pongan cerdo a los tamales, Guacala, es inmundo ante los ojos de mi padre, adiós-- El Señor me tomo del brazo, y de una especie de salto me llevo hasta la nube, a esas alturas, ya no me sorprendía nada. Una vez sobre la nube, EL Galileo me dijo--Hijo mío, solamente me iré contigo, ellos no están listos, algunos de ellos nunca lo estarán, --Y Al Señor respondí-- Su majestad, Rey de reyes, se que tu reino es muy hermoso, y que yo seria increíblemente feliz ahí contigo, lamentablemente, hice un juramento de estar con mi esposa, en las buenas y en las malas, es mi responsabilidad estar con ella, lo siento mucho Señor mío, te pido que me dejes en mi casa, ya que si me dejas en otro lugar, a esta hora no podré conseguir transporte. --El Señor no dijo nada, ya no hablo en todo el camino, solamente me llevo a mi casa, una vez ahí, baje de la nube, dirigí la mirada hacia arriba donde se suponía que estaría El Señor en su trono, pero no pude verlo. La nube comenzó a retirarse, aunque lo mas importante en ese momento para mi, era entrar a mi hogar, en el cual estaba la luz encendida, en la ventana se adivinaba, la silueta de mi mujer, despierta, tensa, en el sofá de la sala, en estos momentos estoy en la puerta, a punto de entrar, ¿Que será de mi?, no lo se, no tengo la menor idea, sin embargo se que no será nada bueno, no puedo decirle a mi esposa acerca de lo que paso, tal vez le diga que me quede a trabajar, o algo mas normal, pero bueno, no creo que haga gran diferencia, amado lector. Después de mi aventura, ahora voy a enfrentar mi verdadero destino, tal vez en otra oportunidad le informe lo que me paso después, pero por ahora me despido de usted, cuídese mucho, hasta pronto.