Buscando peces en el cielo en enero
Los clavos de cristo en febrero
Un olvido entre recuerdos en marzo
Lluvias de ti en abril
Hechiceros sin pociones en mayo
Un abrigo con tu nombre en junio
Un te amo dislexo en julio
Dos copas y un cigarro en agosto
Mas colores en septiembre
Un vistazo hacia atrás en octubre
La alegría de volver a verte en noviembre
Los lentes de sol por tanto brillo de lo que viene... eso queda para diciembre


Así mi año va y viene, entre las fantasías que de a poco se van transformando e una concreta masa de aventuras y realidades, saltando por los lugares donde los que han erigido sus besos construyen amor, del bueno... en un año de intentos, en un año de mi tiempo, no sé dónde irá a parar los meses que no fueron, las cosas que no surgieron, mis pies y mis manos, después que los aplaste el cielo. Ahora no existe, en sus relojes ni en su cuerpo, por eso mírense bien, que nadie está cuerdo, porque sabemos que los demás se comportan como quieren y eso, porque sí, es correcto. ¿para que se atan? En las cuerdas de los correctos ¿acaso ya marcaron un camino los abyectos? Mi año en mi tiempo, puede ser un día, un momento, pero aunque nadie me crea que existo y que estoy escribiendo, el cuerpo de esta mortal me ha servido para callarlos y dejar pensando en quien soy, en qué quiero... un año en mi fantasía, un montón de sucesos, quiero vivir en plena cobardía, por eso uso este cuerpo, me ato de pies y manos y aún así sigo corriendo, hagan lo mismo todos los días que cada quien sabe lo que es bueno, no tomen en cuenta mis ironías, ni los consejos de un pensamiento, partan y hagan su camino, no atrofien lo que tienen dentro, sean lo que no son, sean utópicos un momento, vallan y prueben si pueden los helados de los polos, los cigarros de los pulmones, los alcoholes en éxtasis, ocultos en los rones, prueben y vean si ha sido un año en su tiempo, porque el cajón de su tumba deberá ser cada vez más grande, hasta que tu muerte nos separe...