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Nadie dijo que fuera fácil
recorrer caminos donde tantos se han perdido,
mirar rincones donde tantos han llorado,
nadie avisó sobre el amor.
Manejar armas de doble filo,
afilar un sentimiento,
lanzarlo contra quien lo creó.
Daño donde no hay carne,
daño donde no hay sangre,
daño donde antes habitabas,
daño, donde ahora hay rencor.
Cierra los ojos y sueña,
sueña y olvida el dolor.
Cierra los ojos y sueña.
El descanso del amor.
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Texto agregado el 06-05-2007, y leído por 87
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