Ni soy cenicienta ni tu eres el príncipe azul, yo no busco que me quieras como quiero yo, no quiero azul celeste, no quiero un buen bribón que por la noche me ame y mañana tome su pantalón lo vista lo use y piense que eso nunca existió.

No quiero un castillo ni que me salve de las hermanastras, quiero un hombre el cual me deje llorar a su lado me acompañe en malos ratos y de vez en vez me cante una canción, sin suerte sin voz y con mala entonación, que trate de bailar conmigo sin pedirle permiso a su miedo inseguro del silencio que porta su banda de rock.

No quiero machos polveados, ni celosos jugadores, quiero lo que piden y que en entre manos reciben.

Ni eres ni buscas rescatar a la doncella amada, solo eres el que quieres a la que a mas, ni eres el príncipe de brillante armadura que tiene la gracia perfecta ni eres el que me viene a salvar.

Ni eres el que me roba el sueño por que el desgraciado se espanto cuando decidí mirarte, ni eres el dueño de mis quincenas que se quedan vacías después de pagar las rentas, ni eres la rata de dos patas, solo eres el hombre que vive en ti.

Ni soy la dama que buscas para madre de tus hijos, ni eres el hombre que pensaba que vivía sin sueños ni ilusiones.

Si no eres el hombre perfecto ni el príncipe azul y mucho menos valiente por tu miedo a quererme, que hago yo.

Y si no soy cenicienta, ni la bella durmiente, si no soy la mujer de para ti, por que sueño con despertar contigo un día cuando los dos seamos viejos, para contarte platicarte y reñirte como solo tu me haces, hacer, por que si no eres, sacas lo mejor de mi….