7.49 de la mañana; despierto sobresaltada, impaciente, asustada; tengo que estar en la universidad a las 9.35 de la mañana, tengo cátedra, si repruebo este ramo me desheredan jajaja... mmm no, no lo creo, tranquila confío en mí, confían en mí o ¿Confiarán?, lo preguntaré es una incógnita en todo caso.
Salgo de la ducha mucho más despierta, repasando mentalmente la materia a evaluar, pero me doy cuenta que en el transcurso de la inmensa noche de 2 horas se me ha olvidado algo, se me olvidó descansar.
La noche fue terrible: frío, soledad, sentimientos encontrados y mucha materia que estudiar; El sueño llegó de apoco haciendo que mis párpados cayeran, sucumbieran ante el cansancio, me doy por vencida, me recuesto en la cama, esa cama a la cual me costó acostumbrarme y por causa de ella me duele la espalda aún así no puedo quejarme agradezco que tengo un lugar donde dormir.
Mientras poso mi cuerpo pesado de pesadeces sobre una pesada cama, pienso en como hubiese sido mi vida a tu lado, ya está claro que no estamos juntos; tal vez hubiese sido un problema o tal vez un placer, no sé... Finalmente me duermo, me entrego a los brazos de sueños que de vez en cuando se apiadan de mí cabeza sobresaltándome antes de llegar al final del túnel (Para otros un abismo), pero que siempre va acompañado de una luz que no deja mirar, sino que sólo permite concentrarte mientras caes y de pronto... ¡Despiertas! Entre molestia y diversión; diciendo “La misma estupidez de siempre, el típico túnel o el típico abismo”, pero que más que mal siempre me despierta... Gracias revelación o no sé, a lo mejor sueño placentero por un momento pero catastrófico al final...
Miro el reloj, ni siquiera dormí 15 minutos y ya tengo que levantarme, pero mejor no, mejor me quedo otro ratito más, me siento como una muerta entre el mundo de los vivos, o a lo mejor ellos están muertos y yo viva; que ocurrencia la mía... pero aún así creo que pronto volveré a los que se denomina vida y en un tiempo más espero que sean años, llegaré a la muerte, aún tengo mucho que experimentar: Amor, amistades, familia, viajes, trabajos, en simples palabras muchos compromisos, porque a lo mejor mi vida gira en torno a ellos... mmm a lo mejor ellos giran en torno a mi.
Tengo antojos de cariños, de sentir a alguien a mi lado alguien que me haga sentir nueva, interesante y feliz; pero ya te perdí o ¿Nos perdimos mutuamente? Nunca hemos conversado netamente sobre ello, esa relación que en un momento fue enfermante de cariño y que ahora es enfermante de sufrimiento... aún te quiero...
Escucho algo a lo lejos (Creo que estoy dormida otra vez); me parece escuchar tu voz susurrándome diciendo cuanto me quieres, que me necesitas ¿Ó que me querías o me necesitabas?; no sé, pero me equivoco sobre tu voz, es mi prima que pregunta donde están sus zapatillas, pero que me importa y que les importa a ustedes; tengo sueño sigo durmiendo y finalmente oigo mi celular a lo lejos... maldición son las 7.49 despierto sobresaltada, impaciente, asustada... (¿Ya les relaté eso cierto?).
Llego a mi cátedra, escucho a la maestra decir mi nombre, me presento, me pregunta (Hasta el momento voy bien me ha preguntado concepto de derecho romano vulgar), es una perfección hasta el momento, ella asiente y pregunta otra cosa, pasa a otro tema, contesto más o menos pero me defiendo como la gata que soy, como la gata que tantas veces dijiste que era para ti; pero problemas la profesora pregunta algo que no estudié o que por lo menos no recuerdo haber estudiado, pero que por sorpresa recuerdo a último momento, eso es!!! Está bien respondo bien, pero tu recuerdo aflora con una miserable palabra de mi docente, me siento cohibida y me trabo, decide terminar mi examen, pero aún así me da un salvavidas: “¿Qué es la suplica? Yo respondo: Es un recurso en virtud del cual el rey visigodo puede condonar impuestos... ups, me equivoqué otra vez maldición, no es condonar, iba tan bien, respondí eso sabiendo que eso no era, ella lo recalcó; intento concentrarme en la palabra exacta y bingo es “condonar intereses, multas y penas”, la profesora con risa maliciosa me mira, toma su lápiz, lo posa sobre la hoja, procede a evaluarme... me salvé tengo un 5.5, pero no sé si me salvé por tu recuerdo, por la paciencia de la profesora o por mi...

PD. Es mi primer cuento es de esperar que les guste. Gracias