Te amo, te admiro, te confieso Y tú ríes y murmuras, sólo eso. Y no es mentira que del travieso Niño, no queda ni un solo seso Pues con tu amor has transformado A tu niño, en un hombre amado Y que ama. Como ha cambiado De niño a hombre ya se ha logrado Y todo en esta gran declaración Que deja riendas sueltas a la pasión Y hace brotar con fuerza la emoción Que se siente al amar con devoción Y todo esto lo grito con fervor, Con gran fuerza, con mucha confianza Pues vivo teniendo la esperanza De que escuches mi declaración de amor.
Texto agregado el 02-05-2007, y leído por 113 visitantes. (1 voto)