Librando las más terribles batallas, de sangre, de tiempo, de líneas generacionales, cual guerrero de luz cruzaste todos los firmamentos, sorteaste olas gigantescas, derrotaste dragones... y naciste.
Y llegaste a este mundo para transformar la vida de todos los que te rodeaban. Y ya se anunciaba tu llegada. ¿Sabes? Papá iba recorriendo en su auto—como siempre lo hace—esa enorme carretera donde hay agua a ambos lados. Y cuando llegó a casa y le ayudé a bajar sus cosas, había entre ellas un pedacito de tela azul, de estambre, un gorrito de bebé, anunciaste tu llegada... y mamá te había soñado, chiquito, dormidito, bandote y bodito en su cama. ¡Anunciaste tu llegada!...
Cuando llegaste, las estrellas bailaron y los ángeles cantaron...
Cuando llegaste iluminaste los caminos de nosotros, tus hermanos...
Cuando llegaste demostraste que no hay barrera que no se pueda derrumbar sólo con la mirada del amor...
Tienes todo el poder del mundo, Paulo, eres grande y admirable, eres sol, eres mar. Antes temidos, ahora tiemblan de miedo los fantasmas, y los monstruos, y los seres oscuros con tu luz. No te resisten. Los venciste.
Tu destreza y valor son únicos, como únicos tu sonrisa y tus ojos, que liberan todas las fuerzas positivas del universo... Ave Paulo... ¡Que viva la vida!
Paulo, también "cuentero" está como "poulie" en este sitio, y escribe maravilloso (tal vez es un don familiar).
http://www.loscuentos.net/cuentos/local/poulie/
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