El niño y el paradero

Estaba sentado en la acera de un paradero olvidado, aquel chico con carácter suave y ojos luminosos. Esperaba con ansias el pequeño bus, que lo introduciría en lo que seria la mas bella fábula escrita por lo clásicos, pero aunque el bus no llegaba, a él no le importaba. Entonces se levanto de esa acera y camino a través del paradero, que describía mi mente en un letargo de alcohol y malas juntas; y me di cuenta para mi sopor que al lado de mi brazo izquierdo estaba el hombre complejo, el hombre que vio la realidad como era, y que los demás hombres trataban de loco, fue el Hamlet soñador, fue lo que era, y fue feliz, eso es lo que importa.
El niño siguió su camino a través del congreso de figuras, estaba don Fierro, Ana Maria, Salicio, y para variar, entre el olor a vagabundo olvidado en un país de mentiras, estaba yo, casi realido, casi un soñador como ellos.
El niño caminaba, y caminaba, pasaba por entre ellos sin entender lo que hablaban, hasta que tomo por mi derecha el espacio que Bécquer había dejado al tomar el bus que lo llevaría al lugar de su sentimental prisión, “pobre de aquellos hombres, que nacen en la desesperación, viven en la incomprensión, y mueren en la soledad de los viejos labios románticos”.
El niño me miro y me sonrió, abrió su boca y con una exclamación, me dijo “disculpe, ¿para tomar el bus que lleva a los sentimientos tardíos, esta bien ésta parada no es así?”, yo le lo mire, y un con gesto casi igual le mire y le respondí, “no lose, yo espero el bus que me llevara al quebranto mágico de mi corazón postrado, en sentimientos que no existen...., entonces en ese mismo momento el señor de la triste figura, me dijo “yo también tomo ese bus”, y Ana María me dijo “seré tu compañera”, y yo con ademán de afirmación los tranquilice poco a poco.
“entonces ¿no sabes si llega este bus a la parada de los sentimientos tardíos?”, yo le mire, y sus ojos eran como los míos cuando yo era un chico travieso y tontuelo, y le dije “este bus tiene como terminal mi estación, pero pasara por el lado de tu estación, ósea te bajaras antes, y con suerte ¿no es así?, grite a los demás, y al unísono me dijeron “si, tienes razón”, entonces me miro por tercera o cuarta ves y me dijo “¿por qué tanta pena mi señor escritor?” “por que somos pobres, al tratar de ser ricos, un ejemplo, yo veo a gente dormir en la calle, yo saldré muriendo del hambre, la cultura en tus ojos luminosos se reflejan como falsas esperanzas, mi amor ya no es amor, por que así no se comprende ahora, la gente no esta conforme con nada y ni con ellos mismos..... se matan en apariencias oscuras y despreciables, trato de dar lo mejor de mi para ser una persona noble, pero estoy borracho ahora en la cima de un paradero que me tendrá solo en una parada de autobús con Ana Maria, la muerta en gracia, por no amar como se ama, si no idear un maldito chip transistor llamado amor medieval, así te digo, mi niño ojos de farol leñoso, soy escritor y me duele verte dulce y sin realidad, mira lo de around.”le dije, para que supiera mi malestar y mi pequeña extrañeza de verlo tan joven y tan sincero, le pregunte, ¿por que vas a la estación de los sentimientos tardíos? Muchas serian las respuestas, una de las tantas es que mi madre voló al sur como pato silvestre, dejando a su cría si el don de volar a su lado. Otra seria que al ver en mi mundo sin ayuda de mi estudio, no seré nada. Y otra será la incomprensión de los de ustedes, esos de los que faltan, esos que con una palabra cambian el viento, y los transforman en libertad. Otra de mis respuestas es que me contagio con la decisión doctoral de esos, médicos que velan por Arturo Prat, o Andrés Bello, sin siquiera conocerlos, y los ocupan como pañuelos desechables en sus asuntos de turbiedad masiva, matar a la gente por azules y por rojos, no es moral. Por eso y muchas cosas mas, necesito llorar”. “Y por eso lo sentimientos tardíos”, menos mal niño tierno estas fijando la vista al horizonte, puesto que dios a quitado su sol de este país, lo saco y lo oculto, y dentro de la oscuridad del país, la gente esta hechizada en odio y penas, que solo las emborrachan como yo para no vivir en una sociedad corrupta y ciega.” dije con aire a llanto, y un “Salud” recibí por parte de mi sociedad parlante agonizante, que cada día mas se muere en la pobreza de la falta de lectura.
“Ahí viene la micro niño, nuestra micro, me despido, y te quiero dar un regalo, bueno mas que un regalo es un problema, cuando llegues a la estación llora por mi, llora por los que han luchado para venerarnos, se único niño toma la pluma y defiende al Chile que ya no es “Chile”, si no mas S.A. Chilean Of Gringous, de Europe, LMTDA. Y trata de cambiar mi país, pero todo esto después de que llores por lo que ya llore.