Tangible escapo,
te integro a las líneas de mis senos,
tratando de acomodarte al engaño,
sin que sangres,
sin que intentes vivir dentro
y destrozarte despacio,
con mis tijeras y entre mis labios.

Me gustas recortada,
jugando con tus dedos en mi centro,
y con la mafia en la que no crees,
-y estamos jugando-
con todas mis plétoras,
tragándote,
teniéndote donde te quiero.

Mírame despierta nena
el sol está amarillo, y está maldito,
nos quiere enterradas,
junto a nuestra puta,
-el amor y su pus-
tú carcomida de celos,
yo muerta en mi celo,
ya no importa a dónde vayamos,
tu efecto me hace bruma extraña,
bruma resplandeciente
y es que todos saben que nos inventamos de nada
y nosotras no sabemos nada,
no intentamos marcar el extremo romántico
porque el extremo feliz se amputa con tu sexo
con gracia,
y estamos fuera de consonancia...

Y estamos hechos sensación casera.