Bueno. Sucede que hace tres días estoy buscando a la luna.
(Sí, a la misma. A ese astro manoseado y profanado que ocupan de afrodiciaco)
Sí. Justamente esa que guardaste con sigilo en el pliege medio de tu pantalón. Y que baja, que baja, interrumpido por la tela.
Que baila y emite juicios desquiciados. Que habla. Que calla. Que trabaja.
No por indiscreta introduzco mi mano blanca y pequeña en él.
Es una emergencia orgánica--
Y la química agujada que aclama. Los ruidos, los estruendos, las remoliendas en el cielo.
Sabes?. hay 3 pequeños problemas.
1- Mi lengua.
2- El frío y la obediencia.
3- La luna, la luna (un poco vacía, un poco llena) que ha saltado dentro del closet de madera húmeda, húmeda, e ilegal.
Reviso mi boca, se presenta una lengua (aún un poco prófuga de la decencia y la moral)
Que alguna vez solo sirvió para orar y tantear las cazuelas de la abuela. Y ahora es solo objeto servible de tu boca, del mate, la hierba y la bombilla.
Mi mente de pelo brillante, pedacito de dinamismo adiestrado, adormece y olvida las funciones, la biotecnología, a las miselas (tan graciosamente ordenadas), al colesterol y las quinasas.
Me quedo dispuesta a evaporarme... sin nada mas que hacer he migrado a un espejo, y está allí el borde obligado de tu cuerpo.
No sierven los lentes para mirar de cerca o de lejos.
Cierro los ojos (que ojos! que idiota inventó la vista) Solo me sirve el olfato, para encumbrarmelo todo por instinto (quien mierda inventó la lógica) para detenerse.
Y la tautología. Que niega, que niega.
Y busco a la luna, en teorías tiende a inclinarse al vacío. Da vueltas. Da vueltas. Acelera. Se queja y cavila.
Sí. La mismísima luna y su chaqueta de sudor escandaloso, cargada de aderezos y degustaciones.
Diminutos canapés de jamón serrano.
_ Para servirselo aquí o para llevar?
Sigo pensando.
Y crezco mientras lo hago, eso dicen.
(De pronto he golpeado mi cabeza contra el techo)
Darse cuenta que es más peligroso el aire tibio de allá arriba (cuando te acostumbras) a pasar frío a diario y convercer a la piel de que todo es normal.
Lógica amenazante, y un miedo natural a volar sin parapente, el efecto invernadero (... de tu cama...)
En realidad se extraña- y no sabes cuanto.
Volver a pensar en la luna o tenerte?
(No) y (No)
Mejor silbo, declamo, articulo, canto.
/fuiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiT FuiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiU /
/Lilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilolilo /
/Huipitihuopitihuipitihuopitihuipitihuopitihuipitihuopiti /
Todo parte darle motilidad a mis dientes. Que ya no mascan, no muerden, no degustan, no desgarran.
La ventana y sus companías frías. De donde cuelgan mis piernas.
ABIERTAS- VISTADAS.
Y el grito de la noche que mira. que mira, gime, y se lamenta ser tan universal.
El grito asonante de mi calma y mis costillas, que lloran, que lloran, de temerosas y torpes que son.
Tu piel erizada. El cinismo. Y la sonrisa-
La luna, la luna, perfectamente contorneada. Una llamada telefónica . Y yo otra vez.
Puedo laborar proyectos incumplibles en mi mente-
Sí. Es posible convencerme. Y convencerte
Puedo pensar en hijos perfectamente peinados, en perros sin pulgas y en técnicas de bonsai.
Puedo pensar en como economizar para darnos ese viaje tan deseado, en la decoración del cuarto, en podar las rosas al menos una vez al mes.
Puedo pensarme, y pensarte.
Compararte con eso que jamás quise siquiera palabrear vagamente.
O puedo pensar otra vez en romanticismo- y vomitar.
Pensar en las palabras que nos recuerdan nosé que diablos
Flash.
Gol
jazz
Tic
tac.
Luna.
Adiós.---
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