Un cuento real.

No lo imagine, es una vivencia real.

Muy cansada, después de un buen carrete de amigos. Llegue a mi dulce hogar

es de esos departamentos antiguos, de habitaciones pequeñas y techos altos.

Ya dormida, pensaba solo cosas bonitas !.

Profundamente caí en un estado de letargo. Fue entonces cuando comencé a sentir que me apretaban la cabeza.

Al abrir los ojos, solo divise una silueta oscura y, extremadamente larga.

Sus manos de dedos largos, parecían tentáculos, su aliento emanaba un olor a fármacos y no tenía nariz.

Lentamente este ser, comenzó a decirme cosas con sus ojos.

Me decía que nuestro mundo, estaba lleno de escoria humana, que nuestros defectos eran

consideramos como pestes andantes y, que la humanidad ya no debería de existir.

Paralizada de miedo. Solo atinaba a escucharlo, los gritos no me salían.. Solo quería despertar de ese horrendo sueño.

Después de unos minutos, comencé a levitar como los fantasmas.

Este ser ó ente, estaba exprimiendo mi cabeza y, cada vez sentía más dolor.

Sin saber que pretendía este Ente ó Marciano, me di cuenta, que además, estaba rodeada de otros

más, iguales a este.

Los otros sostenían mis pies y otros más, mis brazos.

Ya entregada al susto y al dolor, solo atine a rezar, pero ni los rezos me ayudaban.

Pasaron largas horas y de la nada, desaparecieron, y solo dejaron una marca en mi estomago. (X)

Hoy lucida total, no entiendo nada.

Me pregunto, ¿ será un simple efecto, de esta poción llamada alcohol ?