Como tengo fe de poco creyente,
Le pido a Dios que me deje tenerte
Tenerte en mi paraíso, que me deje tocar tus labios
Y verme reflejada en el espejo de ojos.
Que por una tarde con su noche me deje tenerte entre mi ropa, me regale la cercanía de tus pensamientos.

Entre el amor que brinca en calidad de fuego ese amor que va mas allá de la piel, que no es carne a carne, que se toca con las miradas y camina por la calle como el programa de televisión o el partido de fut, que se espera con la ansia de la vida, entre un amor y las buenas noches que por torpe y cobarde, permití que te marcharas diciéndole a Dios que me esperaras.

Solo le pido a Dios que me deje quererte, que me deje hacerte feliz como siempre te he querido y aunque juguemos a querer, auque tu quieras menos y yo un día despierte te mire y me de cuenta de que ya no hay deseo