Déjame un minuto De este siglo que juntos Estamos construyendo. Solo nos queda el silencio De aquellos seres Que añoran nuestra presencia. Cuando el fruto Que descargo en tu Ausencia, se me dificulta, Lloro para reconocerte Entre todos los Que se alejan. No te puedo Reconocer; eres Distinta en cada jornada Que regresas.
Texto agregado el 27-03-2007, y leído por 117 visitantes. (0 votos)