Decidimos atracar la joyería esa misma noche, según lo planeado. Ropa, la de caco, pantalón negro, boina, antifaz del mismo color y camisa a rayas amarillas con negras.

Típico de los años cincuenta. Maletín con herramientas: sierra radial y tremendo radiocasette con un disco de los Exploited, el mejor punk inglés en los carnavales de Tenerife.

La calle Castillo en navidades abarrotada de capitalistas.
La calle Castillo en carnavales infectada de sexo, drogas y alcohol.

Perfecto para reventar un candado, colarse por debajo y volver a cerrar.

Encendimos el cassette, Exploited amortiguaba la mierda de salsa con gofio que entraba por las fisuras, mezclada con la alarma antirrobo. El Papua trataba de reventar la caja fuerte mientras yo me apoderaba de los rolex, viceroy, oro, etc.… Las chispas de la sierra de disco hicieron prender la moqueta y tuvimos que salir por patas con medio botín. No sin antes volver a colocar nuevos candados, comprados a consciencia.

La prensa local lo narra de una manera muy distinta. “Empresario del oro prende fuego a su local para cobrar el seguro a todo riesgo y, de paso, el firmado por hurto u asalto”.

¡Ja!


http://www.youtube.com/watch?v=jEDojtvd32c