Aùn en el oscuro, escucho voces del afuera, a travès quizà del ànimo que me dan muchos, como vos. De una pesadilla me conducìs a un sueño, y es que hoy comprendo que aùn se puede soñar.
Tus escritos y poesìas me devuelven a la vida, leo y me emociono, tus letras me sacuden, me estremecen, y hasta trato de retenerlas, llevarlas a mi celda cuando lejos de esta ventana al mundo, al afuera, me encuentro.
Siento tu piel a lo lejos, a travès de tus versos, me imagino como sos, que alma hermosa y tan pasional.
En la oscuridad, cada eco ìnfimo, se escucha de manera especial, ayer a la noche, resonò una risa muy lejos, de forma especial.
Ya no hay luna llena, ni siquiera a la noche ayer, tuve la diversion de contar las rejas, sin embargo tus versos hicieron que pudiera pensar, imaginar y disfrutar.
|