Me iluminaste tú
me llenaste de calor,
eres mi sol de madrugada, de tarde y anochecer,
tu luz me acompaña aún cuando ha salido la penumbra, mi sol de veinticuatro horas, la oscuridad no llega a mi mente porque estás tú, no volverá la noche porque aquí tengo mi sol.
Texto agregado el 21-03-2007, y leído por 157
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